Nueva Yor.- El año nuevo es el momento de fijar nuevas metas, pero los estudios han demostrado que la mayoría de las personas no suelen cumplir sus propósitos de Año Nuevo mucho después del primer mes.
En un intento por replantear la forma de pensar en torno al establecimiento de objetivos para el nuevo año, ha surgido en Internet una nueva tendencia de bienestar llamada "Winter Arc".
Esto es lo que debes saber.
¿Qué es el Arco de Invierno?
El desafío de establecer objetivos fue creado en línea por influencers del fitness y el bienestar, por lo que no existe un enfoque único ni una definición estándar. Hay más de 400 mil publicaciones en Instagram con el título #winterarc y casi 600 mil en TikTok.
Para muchos de los que prueban la tendencia, el Arco Invernal implica aprovechar los primeros meses fríos y oscuros del invierno para mirar hacia dentro y comenzar a alcanzar sus objetivos, con la intención de tenerlos en su lugar para cuando llegue el 1 de enero.
También se pretende alentar a los participantes a ser extremadamente disciplinados y rígidos con sus objetivos, ya que se trata de un período más corto para lograrlos en lugar de un año entero o de forma indefinida.
Laura Galebe, influencer y autoproclamada “CEO de Glowup Series”, publica videos en sus redes sociales en los que habla de su experiencia en Winter Arc. Aprovechó el tiempo para comprometerse a “caminar todos los días, escribir un diario y seguir con sus rutinas de cuidado de la piel y bienestar”.
“Me resultó muy transformador, tanto mental como físicamente”, afirma Galebe. “El movimiento constante me ayudó a mantenerme con energía y la estructura hizo que la temporada se sintiera mucho menos pesada”.
¿Cómo puedes participar?
Aunque algunos dicen que el desafío Winter Arc puede comenzar en octubre, nunca es demasiado tarde para empezar. Según Alex Rothstein, fisiólogo del ejercicio del Instituto de Tecnología de Nueva York, la mejor manera de empezar es reservar tiempo cada día para trabajar en tus objetivos.
“Si te aseguras de planificar y programar activamente cada compromiso”, dice Rothstein, “te resultará más fácil cumplir con el programa”.
También recomienda fijarse metas realistas y razonables que se puedan alcanzar día a día. “Reconozca que si circunstancias imprevistas le hacen perder un día o no alcanzar una meta específica, no significa que haya fracasado en todo el proceso”, afirma. “Debe estar dispuesto a retomar el proceso desde el punto de partida al día siguiente”.
Galebe recomienda encontrar formas de hacer que el ejercicio sea “cómodo y cómodo” en los fríos meses de invierno.
“Si la idea de ir al gimnasio cuando hace mucho frío te desanima, considera hacer ejercicio en casa o apuntarte a un estudio de yoga o pilates en un espacio cerrado con calefacción”, comenta. “Otro consejo es replantear el movimiento como una forma de cuidarse. El invierno es duro para el cuerpo y la mente, así que considero que mis paseos o mis entrenamientos forman parte de mi estrategia para mantener bajo control mi salud mental y física en general”.
Para resumir:
- Establezca metas realistas y alcanzables.
- Planifica tu rutina y encuentra tiempo en tu agenda con antelación.
- Acepta perderte un día y date el espacio para continuar donde lo dejaste.
- Encuentre formas cómodas y acogedoras de mantenerse activo en los meses más fríos.
¿Cuál es el punto?
Elliot Berkman, profesor de psicología de la Universidad de Oregón, afirma que el progreso hacia una meta, más que simplemente el logro de una meta, es psicológicamente beneficioso. Dice que puede brindar “emoción positiva, un sentido de propósito y significado, así como iniciativa y autonomía”.
Cuando se trata de fijar objetivos en un período de tiempo corto y específico, como el Arco de Invierno, dice que esos parámetros pueden ser útiles. “Ponerle un límite de tiempo a un objetivo puede mejorar las posibilidades de lograrlo. Es más fácil mantener la motivación si sabes que puedes parar en algún momento en lugar de sentir que necesitas seguir trabajando duro indefinidamente, lo que puede ser desmotivador”.
En las redes sociales, algunos han hecho comparaciones entre los retos de acondicionamiento físico a corto plazo y las dietas extremas, con la idea de que una vez que el reto termina, uno puede volver a tener hábitos poco saludables. Pero los expertos dicen que eso no es necesariamente cierto.
“Si el desafío se utiliza para ayudar a establecer hábitos nuevos y más saludables para la salud y el bienestar a largo plazo, entonces los desafíos son excepcionalmente útiles para ayudar a guiar y motivar para crear estos cambios”, dice Rothstein. Él recomienda hacer un plan hacia el final del desafío para continuar cumpliendo con sus objetivos de una manera alcanzable y realista.