Ciudad de México.– Con la detención de Ismael “El Mayo” Zambada García en Texas, Estados Unidos, vale la pena recordar cómo la historia del antiguo líder del Cártel de Sinaloa ha impactado en el mundo del espectáculo, específicamente en las series.
La tercera y última temporada de “Narcos: México”, disponible en Netflix, incluyó a Zambada como uno de sus personajes principales. El actor cubano Alberto Guerra dio vida a este antiguo líder criminal.
Para Guerra fue complicado establecer un tipo de personalidad para este hombre originario de Sinaloa, por lo que se basó en artículos periodísticos y libros para conocer su vida y tratar de poner su esencia en la pantalla.
“Justo con él está la cosa misteriosa de que no se sabe casi nada, pero ya sabes dónde va acabar la historia; entonces hay un punto en que debes olvidarte que existe y es histórico, entonces entra la parte creativa donde no sólo es hacer copy paste”, dijo el actor.
“Los escritores (de la serie) hacen la investigación para contar la historia entre ficción y realidad y a mí me toca lo demás. Es como el Titanic, uno ya sabe el final, ya sabe dónde va a acabar. Sabemos qué pasó con El Chapo y el Azul (otro líder), lo bonito es hacer interesante el camino”, agregó.
Alberto consideró que cómo actor no se debe juzgar lo que hicieron personajes históricos como Zambada: “No es el trabajo del actor, por lo menos dentro de la ficción, juzgar al personaje como persona. El trabajo del actor es entenderlo e interpretarlo”.
Añadió que ese tipo de series no son una apología al narcotráfico, sino que se busca retratar una parte dolorosa de la sociedad.
“La ficción es un retrato. Se le ha dado mucho enfoque a eso, porque es una parte muy dolorosa para nuestra sociedad. Es una parte que ha durado muchos días, que ha provocado mucho dolor, pero es una parte de nuestro país. Hay que retratarla”, comentó.
La tercera temporada de Narcos: México se enfocó en el surgimiento de nuevos capos a partir de la independización de los cárteles tras el encarcelamiento de Félix Gallardo en la década de los noventa, entre ellos Amado Carrillo Fuentes, interpretado por José María Yazpik, e Ismael Zambada, por Guerra.
