UN LLAMADO A ATENDER de manera más seria los temas de movilidad de extranjeros en México es lo que ha dejado como reflexión el cobarde ataque al agente de tránsito migración que fue asesinado por personas de origen extranjero ayer, a pocos días de terminar el 2025 y que sin duda deja un terrible vacío en la familia del agente del Instituto Nacional de Migración (INM).
Fue ayer cuando el trabajador federal fue atacado en las inmediaciones de la ruta Juárez a Samalayuca, evento por el que ya se capturó a de dos presuntos delincuentes involucrados en el hecho.
De acuerdo con los primeros reportes, el grupo de migrantes atacó al agente con golpes y piedras durante una inspección de rutina. Aunque se solicitó una ambulancia para atenderlo, el oficial falleció en el lugar debido a la gravedad de las heridas.
Y nos referimos con atender no en el sentido de criminalizar a las personas en situación de movilidad, quienes dejan todo en sus lugares de origen para encontrar una mejor vida y que sin duda, no se puede generalizar o calificar a todos como criminales, más ahora en tiempo de Trump, en los que los migrantes mexicanos también han sido calificados como delincuentes.
Mas bien hablamos de atender cuando se deben trabajar en las causas que originan esa movilidad masiva, a tener mejor control de las fronteras (sur y norte) a ofrecer ayuda humanitaria efectiva y sobre todo, trabajar mejor en erradicar la terrible corrupción que impera en el INM.
Realidad innegable que se ha sido de control al Gobierno Federal, quien ha mostrado poco interés en darle atención y que solo trabaja cuando sede a las presiones del vecino del norte. La muerte del agente merece castigo en contra de los culpables, sí, pero que esto no dé pie a exponer y exaltar la xenofobia en nuestro país.
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GUADALUPE Y CALVO SIGUE CON PROBLEMAS DE VIOLENCIA, más evidenciada ahora que alrededor de 60 personas abandonaron la comunidad de Dolores, en el mencionado municipio, para establecerse en Parral para buscar mejores condiciones de vida, todo esto reconocido ya por el propio fiscal zona sur, Juan Carlos Portillo Coronado.
Y aunque las autoridades estatales aseguran que no hay un antecedente de amenazas directas en contra de estas familias al escuchar y ver la situación que prevalece en la zona, decidieron salirse de la comunidad. Y no es para menos, sobre todo cuando la delincuencia organizada ha mostrado en las últimas semanas que se ha sofisticado más en sus ataques con los eventos de los “dronazos” en contra de los cuerpos de seguridad.
No es descabellado entonces pensar en salir de este lugar de violencia cuando las propias autoridades se ven amenazadas por los grupos del crimen, que pensar lo que podría sucederle a un ciudadano común.
Por lo pronto El fiscal dijo que desde su dependencia hubo acercamiento con estas familias para asesorarles respecto a alguna denuncia que les diera la calidad de víctimas por desplazamiento forzado, aunque no mostraron interés en hacerlo, nada extraño, cuando sabemos que el índica de impunidad en México es grande, más cuando convienen callar para salvaguardar la vida propia y de la familia, una situación que no debería existir en ningún Estado considerado democrático.
Juan Carlos Portillo descartó un toque de queda en Guadalupe y Calvo y las comunidades aledañas, pues fueron intensificadas las acciones de las células BOI tanto en la cabecera municipal, así como en las comunidades de El Pinito, Dolores y otras cercanas donde se han tenido algún tipo de evento. Esperemos que este tipo de trabajos puedan realmente devolver un poco la calma a una región serrana marcada por la violencia desde hace ya varios años.
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HOY ES EL ÚLTIMO DÍA DEL 2024 y el ambiente festivo ya se puede sentir en las calles de nuestra ciudad, celebraciones en donde nunca falta la familia, la comida y la bebida y junto a ella algunas situaciones que pueden poner en peligro la vida propia o la de personas ajenas por el abuso de estas sustancias.
Por ello ya el Gobierno local en Juárez anunció un operativo especial con cerca de 80 agentes de vialidad que estarán por todas las calles para vigilar que los conductores no abusen del alcohol al momento de circular por las avenidas de Juárez.
Y es que la advertencia ya está ahí, Víctor Mejía, director operativo de Vialidad, ya dijo que el Cerecito sí estará habilitado para quienes sean sorprendidos manejando en condiciones inadecuadas, pasará el 2025 en castigo.
Esta media busca pues que el siguiente año no inicie con cifras preocupantes en cuanto a fatalidades en las calles, más cuando este 2024 tuvimos casos tan terribles, como el accidente en el Norzagaray.
Las cifras no mienten, de acuerdo con la Coordinación General de Seguridad Vial, al menos 65 personas han perdido la vida en accidentes, ya sea por choques, percances de motociclistas o atropellos con corte a octubre de 2024. Más allá del miedo al castigo, debemos tomar conciencia y ser responsables en que si nos pasamos de copas, es mejor no conducir.
