ESTE 2025 COMENZÓ CON EL PIE IZQUIERDO en lo que se refiere al número de accidentes relacionados con el alcohol y el volante, una mala combinación en los que desgraciadamente nuestra frontera cuenta con muchos ejemplos de la irresponsabilidad de los conductores y que terminan en tragedias que golpean no solo a la familia de la víctima, sino también a la de la persona responsable del accidente.

Para muestra las cifras del recién terminado 2024: 6 mil 173 accidentes viales, 2 mil 217 personas lesionadas y 74 víctimas mortales, según datos de la Coordinación de Seguridad Vial.

Estos fríos números, que cada uno cuenta una historia distinta, confirman que la frontera sigue siendo uno de los puntos más peligrosos para conducir en el país. El exceso de velocidad y la falta de pericia al volante se mantienen como las principales causas, detrás de choques, volcaduras y atropellos.

Y es que a pocas horas de haber comenzado las primeras horas de este primer cuarto de siglo, nuestra frontera ya marcó su primer dígito rojo al registrarse el primer accidente en la carretera Juárez - Ahumada, en el kilómetro 324, cerca del poblado Samalayuca.

La falta de atención por la intoxicación por alcohol provocó que el conductor de un vehículo Ford Fusion en color rojo se metiera en sentido contrario por la carretera e impactara a una camioneta Ford, en donde viajaba una familia.

El accidente dejó a una persona muerta, identificada de manera preliminar como Miranda Grijalva, y que de acuerdo con agentes de la Guardia Nacional, en el vehículo causante del lamentable suceso viajaban miembros de la Secretaría de Seguridad Pública Municipal.

Esta acción sin duda exige y muestra la necesidad de seguir tomando conciencia sobre la responsabilidad de llevar un auto (un objeto de más de 2 toneladas) en estado inconveniente y que se convierte en un arma no solo para quien lo conduce, sino para los otros que están cerca. Prevenir es mejor que lamentar.

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TODOS LOS JUARENSES ESPERÁBAMOS UN AÑO NUEVO DE PAZ, una frase tan cliché y repetida por todos, pero que en una ciudad como la nuestra, marcada por años y años de violencia, tiene un sentido muy diferente y muy marcado que en muchos otros sitios del mundo.

Esos deseos se vieron opacados, por desgracia, en el primer día del pasado 1 de enero del 2025 cuando se hizo el hallazgo de una persona sin vida, envuelta en una bolsa negra, en la colonia Independencia y apenas a 30 minutos de haber iniciado el año.

El segundo hecho violento llegó en la tarde, cuando Dos hombres se encontraban reunidos al interior de un domicilio en la colonia Santa María cuando fueron sorprendidos a balazos. En el atentado, los dos hombres fueron asesinados.

Estos dos hechos marcaron ya las primeras tres víctimas registradas como homicidios en este frontera, pero frente a estos hechos lamentables, los ciudadanos de a pie no perdemos la esperanza de poder recuperar la calma que tanto ansiamos y sigue el llamado a las autoridades a garantizar el derecho a la seguridad y a no bajar la guardia.


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NO TODAS SON MALAS NOTICIAS, en una situación donde reina la incertidumbre, llega la esperanza de un nuevo comienzo, de una nueva vida, de un mejor futuro. Con mucho amor fue como la madrugada del 1 de enero Naomi recibió a Josué a las 12:40 de la mañana en el Hospital de la Mujer en Ciudad Juárez.

Josué fue el primer juarense nacido en este primer cuarto de siglo XXI, llegó en un momento en que muchos vaticinan serios retos para nuestra ciudad, para nuestro país y para nuestro mundo, pero ¿cuándo no lo es? La vida misma por naturaleza es un reto.

La mujer tuvo un parto natural y tanto ella como su hijo gozan de buena salud. Héctor Rafael Ortiz Orpinel, Secretario del Ayuntamiento, acudió al Hospital de la Mujer, en representación del presidente Municipal Cruz Pérez Cuellar, para dar la bienvenida al nuevo ciudadano fronterizo de este 2025 y lo llenaron de algunos regalos que servirán en los primeros días de su vida.

Ahora nos toca como sociedad seguir luchando por tener un mejor espacio para vivir, seguro y con garantías de nuestros derechos, en plena libertad de desarrollamos. Nos toca ahora a todos seguir peleando para que niños como Jusué en un futuro no muy lejano puedan gozar de un Juárez próspero, luchemos por nuestro presente y por su futuro.

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