Washington.- Es la última temporada navideña para el presidente Joe Biden y su esposa, Jill, quien ha decorado la Casa Blanca con algunos elementos llamativos para evocar la “paz y la luz” de la temporada.
La exhibición festiva incluye un imponente árbol de Navidad rodeado de un carrusel, campanas de color bronce y cascabeles alineados en un pasillo y un diseño de techo que imita la caída de nieve.
La Casa Blanca ofreció un vistazo previo a periodistas el lunes antes que la primera dama presente formalmente las decoraciones más tarde en el día. El tema es “Una Temporada de Paz y Luz”.
“Mientras celebramos nuestra última temporada navideña aquí en la Casa Blanca, nos guían los valores que consideramos sagrados: la fe, la familia, el servicio a nuestro país, la amabilidad hacia nuestros vecinos y el poder de la comunidad y la conexión”, escribieron los Biden en una guía conmemorativa de las fiestas que se entregará a todos los visitantes. La Casa Blanca espera que alrededor de 100 mil personas la visiten este mes.
Más de 300 voluntarios pasaron la semana pasada decorando los espacios públicos de la Casa Blanca y sus 83 árboles de Navidad con casi 3 mil 48 metros de cinta, más de 28 mil adornos, más de 2 mil 200 palomas de papel y unas 165 mil luces utilizadas en coronas, guirnaldas y otros adornos.
El árbol oficial de la Casa Blanca, un imponente abeto Fraser de Carolina del Norte que fue anclado al techo del Salón Azul después que se retirara una lámpara de araña, se encuentra en el centro de un carrusel estilo parque de atracciones con renos, cisnes y otros animales que suben y bajan en postes. El árbol está decorado con luces multicolores parpadeantes y dulces festivos tridimensionales como mentas y caramelos de cinta. También lleva los nombres de cada estado y territorio de Estados Unidos y el Distrito de Columbia.
Los invitados entrarán a la Casa Blanca bajo una estrella giratoria y rápidamente se encontrarán con el Árbol de la Estrella Dorada, que honra a las familias de los integrantes de las fuerzas militares que han muerto en servicio. El árbol está hecho de seis estrellas doradas, una para cada una de las seis ramas de las fuerzas militares, apiladas una encima de la otra.
Las campanas que alinean el pasillo de la Columnata Este simbolizan los sonidos de las fiestas. El techo y las ventanas en el piso superior del Salón Este están cubiertos con decoraciones reflectantes diseñadas para crear la sensación de que nieva. Siluetas de personas tomadas de las manos decoran las bases de dos grandes árboles de Navidad que flanquean la puerta central de la sala.
La luz brilla a través de adornos de vidrio de colores y prismas en el Salón Verde mientras que palomas de papel en el Salón Rojo llevan mensajes de paz. Las palomas también están suspendidas en el aire a lo largo del Pasillo Cruzado, que corre entre el Salón Este y el Comedor de Estado.
En el Comedor de Estado, una explosión de estrellas hecha de azúcar brilla sobre la enorme Casa Blanca de jengibre, que incluye los terrenos del sur cubiertos de nieve salpicados con docenas de mini árboles de Navidad parpadeantes y una escena de personas patinando sobre hielo en una pista en el césped del ala sur.
La confección azucarada —que sólo es para fines de exhibición y nunca se come— fue construida usando 25 hojas de masa de jengibre, 10 hojas de masa de galleta de azúcar, 29,5 kilos (65 libras) de pastillaje, una pasta de azúcar, 20,4 kilos (45 libras) de chocolate, 22,7 kilos (50 libras) de glaseado real y 4,5 kilos (10 libras) de pasta de goma.
Como parte de Joining Forces, la iniciativa de la Casa Blanca de Jill Biden para apoyar a las familias militares, la primera dama invitó a las familias de la Guardia Nacional a ser los primeros miembros del público en disfrutar de la decoración navideña. El difunto hijo de los Biden, Beau, sirvió en la Guardia Nacional del Ejército de Delaware. Falleció de cáncer cerebral en 2015.
Biden dejará el cargo el 20 de enero.
