Ciudad Juárez.– De una mujer reservada, de cabello muy corto y rizado, la presidenta electa de México Claudia Sheinbaum Pardo ha evolucionado a la imagen que ahora muestra: la de una líder centrada y fuerte. El experto en imagen pública y colaborador de NET, Carlos Emilio Carranza, nos comparte un análisis de la primera mandataria mexicana, lo que deja ver de su personalidad y las áreas que podría mejorar.
“En imagen política todo comunica, absolutamente todo quiere decir algo, desde la punta del pie hasta la punta del cabello manda mensajes de tus aspiraciones, metas, y objetivos presentes y futuros”, comparte el experto en imagen de muchas celebridades. “Es un tema que me apasiona muchísimo, de la imagen pública, es la lectura de rostro y la decodificación de la misma, los rasgos faciales hablan por sí solos”.
La cara de la mandataria
“De personalidad orgullosa, pero al mismo tiempo insegura y con muchísima dificultad para sonreír de manera abierta y honesta, es aquí dónde radica su problema más fuerte, pues la sonrisa abre canales de comunicación”, menciona Carlos.
Y explica que el rostro se divide en tres partes, “en la frente se lee la parte intelectual, por eso su carrera de ingeniería, la inteligencia y la capacidad de negociación, pasando por la inteligencia emocional, se puede ver que es racional y reactiva, eso lo da una frente amplia, redonda y ovalada”.
Mientras las emociones: “se encuentran desde la punta de la ceja a la punta de la nariz y vemos que esos ojos pequeños son muy meticulosos que todo lo escudriña, todo lo analiza, es muy enfocada y objetiva, su nariz es puntiaguda y aerodinámica con capacidad de movimiento, y ágil de pensamiento, aunque solo ve su beneficio”.
La otra parte del rostro, el poder de decisión, se lee de los labios y el mentón: “vemos que este termina oval es territorial y generalmente cuándo a algún individuo no lo dejan desarrollarse abiertamente se le crean esas líneas a los lados de los labios que se conocen como líneas de ventrílocuo y son el reflejo de las instrucciones de su partido que no la dejan desbordar su creatividad, por eso su rictus de tristeza eterna, sus labios pequeños y casi inexistentes dicen que batalla para la comunicación, ella es más de redactar que de hablar”.
De los rizos al lacio
“El Gurú del Estilo” agrega que el cabello y el peinado son también parte de lo que refleja nuestra personalidad. “La tan comentada coleta de caballo: generalmente este peinado tan rígido habla de una personalidad rígida, cuadrada y que siempre se guarda ideas y planes para sí misma, esto es contención de ideas y de talentos escondidos, creo que si se relajara un poco y se reconciliara con sus rizos daría una imagen más cercana, más terrenal y más abierta al acercamiento de sus votantes”.
Un líder sencilla y humilde
“Su personalidad es de gusto humilde, moderado y muy intensa en su vida pública”, al preguntarle a Carlos Emilio cómo ve proyectado el liderazgo de Sheinbaum con su personalidad, él considera: “por lo pronto es la figura de autoridad que pasará a la historia como la primera mujer en ser presidenta de México. Para ser una líder solo el tiempo lo decidirá”.