Definitivamente una solución para abordar el tema de la inseguridad y la violencia lo representa la prevención, haciendo labores de intervención en los que se cambie la forma en que los mensajes y las formas de convivencia sean lo más sano posible, en la que se haga que los padres de familia estén conscientes de la gran responsabilidad de tener hijos, que no se trata de solo tenerlos, sino de supervisar su crecimiento y desarrollo y eso no es algo tan complicado, debemos recordar que los pequeños aprenden sobre todo con el ejemplo, esto es, si queremos que nuestros hijos respeten a las mujeres, no podemos, bajo ninguna circunstancia, ser agresivos con su mama, pues el ejemplo jala, y pese a que el pequeño que ve como agreden a su madre, por lo regular no le parece y le duele ese maltrato, en muchos casos repite esa forma de comportamiento, por supuesto que no es la regla, pero si ocurre con mucha frecuencia y desde ahí la ciudadanía podemos poner un granito de arena para prevenir más casos de violencia; pero la autoridad es quien debe poner mayor énfasis en atender ese asunto creando estrategias que hagan que prevalezca la paz en nuestro país, partiendo desde la infancia, para eso se les concede esa facultad, y mientras esas estrategias de prevención dan resultados, se debe atender el problema que tenemos ya en este momento y no, simplemente dejar hacer a la delincuencia actual.
Por lo mismo, no se vale tratar de minimizar el problema con declaraciones simplistas en las que sin ninguna prueba, se pretenda convencer a la población de que ya se logró “estabilizar el crecimiento desmesurado, progresivo de violencia”, como lo afirmó el propio Andrés Manuel López Obrador, esto lo soltó luego de que le cuestionaran, en sus famosas mañaneras, las declaraciones del gobernador de Tamaulipas, Francisco García Cabeza de Vaca, quien aseveró que el crimen organizado ha provocado un “narcoterrorismo”.
Según el mandatario federal “hay cierta nostalgia”, pues “quisieran que se arrasara como era antes”, y criticó a los expresidentes Vicente Fox, Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto, quienes según el ejecutivo, “no atendían este tema de manera personal”. Cierto Calderón declaró una guerra contra el narco que desató la peor escalada violenta de que se tenía memoria –en ese entonces- la cual persiste y se incrementó de forma impresionante en la actualidad y más porque no se tiene ninguna estrategia para combatirla. Ni antes ni hoy, pues eso de que ahora la inteligencia del Estado está destinada a garantizar la seguridad, no se ve por ningún lado, es mentira que se estabilizó el crecimiento desmesurado, progresivo de violencia, de otra forma como se explica, que nada más en octubre se registraron 2 mil 866 homicidios dolosos, 38 más que el mes anterior, eso de ninguna forma se puede interpretar como una estabilización.
Y con esos datos AMLO, quiere convencer a la población de que ya se estabilizó la violencia, aunque lo más seguro es que el mandatario tenga otros datos.
Pero, como ya sabemos, los políticos de todos los colores, con sus honrosas excepciones, siempre justifican sus malos o nulos resultados, culpando a los anteriores, y el ejemplo lo puso el presidente de la Junta de Coordinación Política del Senado, Ricardo Monreal de Morena, quien afirmó que la escalada de violencia es producto del “coletazo” de dos sexenios violentos de pasadas administraciones, y pese a que se sabe que se tiene un serio problema en cuestiones de seguridad y violencia, en el presupuesto federal le redujeron recursos a la Fiscalía General de la República (FGR).
¿A quien en su sano juicio sabiendo cuál es su talón de Aquiles se le puede ocurrir tan brillante idea?, y la respuesta es a López Obrador, pues el envió el proyecto de presupuesto y como es costumbre de los legisladores de Morena, obedecieron al pie de la letra, a quien consideran le deben el puesto, y la verdad es que efectivamente se lo deben a AMLO pues ellos –los legisladores de Morena-, la verdad no traen idea de lo que es su labor, ya que se han dedicado a apoyar todas las iniciativas y deseos del presidente, por lo que su único mérito es la clásica de levanta dedos y esa no es la idea…