En lo que va del 2024, la creación de empleo formal en Ciudad Juárez y en el país, está estancado, por lo que ahora es más difícil hallar una plaza laboral, tanto para jóvenes, como para lo que no lo son tanto.

Algunas fuentes al interior del sector maquilador, me han comentado que las contrataciones están paradas y que cuando se abre una vacante, hasta filas se hacen, lo cual, no era algo común aquí.

De acuerdo con las estadísticas del IMSS, en diciembre de 2023, la ciudad cerró con 494 mil 522 trabajadores registrados. Para agosto de este 2024, hay apenas 729 empleos más que el último mes del año pasado.

Esto quiere decir que las plazas registradas hasta agosto de este año, alcanzan las 495 mil 252. Hay pues un estancamiento, sería una necedad negarlo con los números en la mano.

Hay que puntualizar que se han estado organizando ferias de empleo, algunas por parte del gobierno estatal y otras por organismos privados, y ambos esfuerzos son de reconocerse. Sin embargo, las estadísticas nos dejan ver que no es suficiente.

Este estancamiento se encamina a su segundo año, pues la debilidad comenzó en abril de 2023, así que habrá un cierre de sexenio con un mercado laboral de capa caída.

En el ámbito nacional, las cosas no son una pera en dulce.

En los ocho meses del 2024, se crearon empleos a un promedio mensual de 45 mil plazas, para alcanzar un total de 365 mil 449.

La cifra es a todas luces, insuficiente para una economía con casi 130 millones de habitantes.

Aunque queramos ser muy optimistas y desear que se abran plazas al por mayor, la realidad dice que eso no va a suceder pronto, y menos con las cosas que están sucediendo en México, donde cada día es más complicado abrir una empresa.

Aquí entran varios temas, como la inseguridad, las extorsiones a productores, la reforma judicial, la corrupción, entre otros.

Hay que destacar que son las empresas las que crean en empleo, y lo hacen cuando invierten y se expanden. Si no sucede lo anterior, no hay trabajo suficiente para la población.

Lo lógico, sería que el gobierno mexicano, facilitara los trámites, eliminara regulaciones y diera un buen trato a empresarios e inversionistas, para estimular la creación de trabajo para la población, pero la verdad, es que son otro tipo de agrupaciones las que reciben abrazos, mientras los otros, reciben patadas.

Si a eso, agregamos, que en Estados Unidos los consumidores están con los bolsillos y las tarjetas agotadas, pues no habrá órdenes de trabajo para llenar de materiales las líneas de producción manufacturera y con ello, mano de obra para procesarlas.

La situación de la guerra de EU con China, debiera ser una oportunidad para que México, produzca todo lo que los norteamericanos dejaran de importar de allá.

También, hay una guerra en Europa y otra en medio oriente, lo que implica una alta producción de manufactura de material bélico y si Estados Unidos no quiere enviar el “know how” a países hostiles, la opción lógica será México.
Pero ya sabemos que las condiciones actuales en nuestro país, no brindan certidumbre a grandes inversiones y, por lo tanto, estamos dejando ir la oportunidad.

La creación de empleo, no solo le brinda a las personas un ingreso para sobrevivir, sino que también, se generan impuestos que van a las arcas gubernamentales y del Seguro Social, por lo que debieran pensar en ello.

En síntesis, mientras no exista un ambiente adecuado para abrir empresas, no habrá tampoco, suficiente empleo.

Es pues, una oportunidad para el gobierno que encabezará Claudia Sheinbaum, de hacer las cosas distintas y convertirse en una líder que genera condiciones propicias para la prosperidad de todos los mexicanos. Veremos y comentaremos.

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