Ciudad de México.- La ola de violencia en Nuevo Laredo, Tamaulipas, ha provocado que las tiendas de conveniencia Oxxo cierren para evitar que sus sucursales sean dañadas y los empleados afectados.
El consorcio Femsa informó se cerraron 191 tiendas y gasolineras en la localidad para garantizar la seguridad de los empleados.
Femsa denunció ante la Fiscalía General de la República (FGR) y reportó el hecho al gobierno de Tamaulipas. La primera respuesta fue por parte de la Federación que envió 100 elementos de élite de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).
En tanto, la Vocería de Seguridad del Gobierno de Tamaulipas informó que tras dialogar con representantes del consorcio se acordó la instalación de botones de pánico y se dijo que la empresa tenía intenciones de reabrir.
El consorcio no ha dado a conocer qué tipo de “actos violentos” pusieron en riesgo a las y los trabajadores.