Ciudad Juárez.- Recurrir a prácticas como regar o rociar los jardines y parques al mediodía con la idea de que el sol evapore el agua y se "provoque" la formación de nubes, es una estrategia equivocada, por lo que un especialista nos explica porqué debe evitarse.
Debido a la información que se ha replicado ampliamente a través de las redes sociales en las que, mediante publicaciones se convoca a la ciudadanía a recuperar el agua ya utilizada en los quéhaceres del hogar, para luego regarla en los patios y parques al mediodía con el objetivo de que se evapore y se formen nubes.
En entrevista para Netnoticias, el doctor en ciencias y tecnología, Felipe Adrián Felipe Vázquez Gálvez, coordinador del Centro de Ciencias Atmosféricas y Tecnologías Verdes de la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez (UACJ), detalló que la medida es idealista, pero definitivamente esa medida no provoca el resultado deseado.
“Yo la considero totalmente inefectiva, el concepto de evaporar agua es cierto, pero la mayor contribución para la formación de nubes es lo que conocemos como evapotranspiración, es lo que sudan las plantas. Todos los árboles respiran, y cuando respiran avientan agua, por eso genera frescura”, dijo el especialista.
El nivel necesario para que esta práctica pudiera tener un efecto medible en Ciudad Juárez, requeriría de una cantidad de árboles similar al de la Sierra Tarahumara, para concentrar suficiente humedad que reflejara un efecto real.
“Una cubeta de agua, o mil cubetas de agua, o 10 mil cubetas de agua no pinta en términos generales”, apuntó el doctor.
En cambio, la práctica que se debe impulsar y concientizar para que se aplique como una política pública eficiente, es la canalización del agua del drenaje a las plantas tratadoras para su regeneración, lo que permitirá utilizarla para otros fines.
“El agua que nosotros echamos al drenaje va a la planta de tratamiento, que la depura y la rehúsa como línea morada, que es la que se usa para regar parques. Realmente tiene mucho más efecto porque están poniendo línea morada en los parques. Eso tiene mayor impacto en términos de evapotranspiración, porque riega plantas que van a crecer y a su vez van a emitir, luego lo que se logra evaporar de las mismas zonas de riego”, planteó Vázquez Gálvez.
Mencionó que, pese a que su postura no es tajante para que la población no lo realice, sí convocó a que sean otras las medidas aplicadas para que exista un buen aprovechamiento del recurso vital.
“Es una muy buena intención, pero no es una solución real al problema. Hay cosas que están más allá de nosotros, entiendo la buena voluntad, pero hay cosas que no hemos hecho por decenas de años y no las podemos corregir en una temporada”, reflexionó.
El especialista indicó que en la ciudad existen de dos a tres metros cuadrados de áreas verdes por cada habitante, sin embargo, la recomendación de la Organización Mundial de la Salud (OMS) son nueve metros cuadrados per cápita; por lo que en Ciudad Juárez se carece de estos puntos de captación de agua al subsuelo e interacción entre vegetación y atmósfera.
Los esfuerzos son recientes, como la ampliación de la línea morada a más parques para evitar el uso de agua potable en el riego; así como los intentos de forestación, pero Vázquez Gálvez mencionó que la ciudad va años tarde en intentar aplicar medidas de contención y prevención de las altas temperaturas, a su vez, del mejor aprovechamiento del agua.