Ciudad Juárez.– Ghosting Laboral es un término cada vez más conocido entre los reclutadores, buscadores de talento o áreas de recursos humanos de los centros laborales, e identifica a los aspirantes a un empleo o a los empleadores que desaparecen luego de buscar una vacante.
Inés Velasco, con alrededor de 20 años de experiencia y que hoy es parte de la empresa Sigma Solutions en el área de Adquisición de Talentos, comentó que este fenómeno no es nuevo, solo que desde que se empezó a usar el término de “Ghosteo” (que en inglés significa fantasma) la gente empezó a reconocerlo.
“Siempre ha existido y últimamente de uno o dos años a la fecha ya nos ha pasado mucho con lo administrativo, yo tengo ya 15-20 años de experiencia con el reclutamiento, pero antes era muy raro que pasara con niveles administrativos, más bien era como operativos”, relató la reclutadora.
Explicó que lo más común que se ve es que hacen el contacto como aspirantes a un puesto y no acuden a las entrevistas, o ya no le den seguimiento a los procesos que deben seguirse como parte de la contratación, es decir que “ya no tienen la atención de decir 'ya no me interesa ese puesto, ya no voy a acudir a la entrevista', que se puede dar por muchas situaciones, pero generalmente atiende a un tema de cultura no estamos acostumbrados a decir que no”, consideró Velasco.
La reclutadora que se dedica precisamente a la búsqueda de talentos para las áreas administrativas en la industria, dijo que uno o dos años a la fecha el ghosting laboral se ha extendido a los niveles administrativos, pero incluso se han presentado casos hasta niveles gerenciales, “¡lo podrá creer, increíble, insisto tiene que ver con la cultura de que ya la gente no sabe decir que no!”
“Si un candidato ya no quiere avanzar en el proceso se vale, pero cuando se corta el contacto, se terminan cerrando las puertas ellos mismos y esto no lo alcanzan a ver, porque si mantienen el contacto incluso podrían aspirar después o para otra vacante”, explicó.
También las empresas hacen ghosting, desaparecen
La profesionista reconoció que este fenómeno va en dos vías, porque si bien sucede cuando la o el candidato ya no le contesta al área de reclutamiento o contratación de personal, búsqueda de talentos; también puede pasar que las empresas se esfuman del radar del aspirante a un puesto laboral.
De acuerdo con Velasco la agencia de reclutamiento para la cual presta servicios siempre busca llevar ciertos controles que aseguren que las o los candidatos siempre tengan una respuesta a sus procesos, no en todos lados sucede igual.
Para esta reclutadora estas situaciones pueden suceder cuando las empresas son muy grandes o no tienen un control adecuado de retroalimentación hacia sus candidatos también se presenta este “ghosteo” que, si bien podría no ser premeditado, puede presentarse por la falta de controles o retroalimentación en esta área.
“Lo que pasa es que simplemente el candidato ya nunca tiene una respuesta hacia su proceso, lo cual también es muy desafortunado porque la gente, merece la atención que le digan que no pasó o que no avanzo en su proceso, pues también muchas veces están ellos sin trabajo o una situación de que están esperando retroalimentación porque están en aprietos, también es más común de lo que nos gustaría a los que no dedicaron a esto” expresó la buscadora de talentos.
Miguel Adame, gerente nacional de Contratación de la empresa BRP que un proceso de contratación puede extenderse por varias semanas (entre 45 y 60 días para el llenado de una vacante en su caso) pues incluye el acuerdo para la entrevista con el área de contratación, con el gerente del área que requiere la vacante, exámenes médicos, etc.
“Hay gente que aplicó y la empresa no ha regresado con ellos para decirles muchas gracias por haber aplicado, pero lo que si te voy a decir es que en BRP tenemos sistemas de comunicación, inclusive con Inteligencia Artificial donde cuando yo termino mi proceso de vacante, en automático todos los que aplicaron reciben una notificación de que la vacante ya fue cerrada”, detalló el directivo.
Sin embargo, este directivo admite que no todas las empresas cuentan con estos procesos automatizados que el describió.
Para Inés Velasco, esta tendencia de empleadores o buscadores de empleo que desaparecen, es algo creciente en la contratación de personal y no atiende a los términos de la oferta y la demanda, pues de acuerdo a su experiencia, aunque este año la oferta de trabajo ha disminuido el ghosting sigue en aumento y aunque no existen estadísticas al respecto, lo que sí puede decir es que es una práctica que no le conviene a ninguno de los dos lados.