Ciudad Juárez.- En menos de un mes la Escuela Primaria Ignacio Manuel Altamirano, ubicada al poniente de la ciudad en la colonia Morelos, ha sufrido seis robos que suman poco más de 35 mil pesos en pérdidas, por lo que la comunidad educativa pide a las autoridades respuesta a las denuncias y seguridad.
La directora del plantel, Marissa Oble Acosta, dijo en la entrevista para Netnoticias que han ocurrido seis robos en menos de un mes, por lo que han acudido ante la Fiscalía General del Estado para realizar las denuncias correspondientes.
“Se ha perdido tanto dinero en efectivo, equipo y la bodega de las tienditas escolares tanto del turno matutino como vespertino han sido robadas. Nos ha afectado por la pérdida de lo que han aportado los padres de familia, en una noche se pierde”, explicó.
Aseguró que la comunicación con los padres de familia es estrecha, debido a que ellos mismos han mantenido una observación y monitoreo del plantel. En una ocasión lograron ver al ladrón dentro de la escuela, llamaron a la autoridad y para cuando llegaron las unidades el responsable había escapado.
Entre el equipo que ha sido robado se encuentran cañones proyectores, bocinas, extensiones eléctricas, dinero en efectivo, calentones, una sopladora, dulces y hasta refrescos.
“Pusimos alambre de púas en áreas que faltaba, tuvimos que reforzar, se pusieron unas cámaras y las reparaciones que además del trabajo es un gasto económico. Todo esto es de los recursos de los papás, hasta ahorita todavía no hemos tenido respuesta del gobierno para estas soluciones”, explicó la maestra.
El día de hoy se convocó de forma urgente a una junta con los padres de familia en donde se expusieron los resultados de las múltiples afectaciones e ingresos a la escuela por parte de los amantes de lo ajeno, así como algunas propuestas y cotizaciones para instalar más cámaras, sensores o la contratación de un servicio de seguridad privado.
El último robo fue la madrugada del viernes 10 de mayo, ingresando a diferentes áreas como bodegas, salones, cocina y sala de maestros.
Luego de hacer un monitoreo de el perímetro de la escuela, se ubicó dulces y refrescos tirados en la barda trasera por la parte externa, por lo que se sospecha que los ladrones ingresan por la zona de colindancia con el preescolar aledaño.
"Después de llamar al 911 llega Seguridad Pública, nosotros vamos a Fiscalía a poner la denuncia y sí han venido dos veces los ministeriales, pero solo tomaron fotografías y dijeron que se iba a abrir la carpeta”, dijo la maestra.
Madres de familia que integran la sociedad de padres detallaron que la vez que se observó a ladrón al interior de la escuela, las unidades de Policía Municipal tardaron hasta 40 minutos en llegar, por lo que exhortaron a las autoridades a responder de forma urgente las denuncias y llamados de emergencia, para hacer la diferencia en el proceso y capturar al responsable.
Luego de la reunión algunas de las propuestas que surgieron fueron subir la altura de la barda perimetral, instalar cámaras en más puntos para poder identificar al responsable, o bien, una alarma con sensores de movimiento que se active para alertar a los vecinos y padres de familia.