Santo Domingo.- Las autoridades dominicanas han arrestado a un coronel y nueve oficiales acusados de robar armas y municiones del arsenal del departamento de policía y venderlas ilegalmente a varias personas, entre ellas criminales en el vecino Haití, donde la violencia ha aumentado.
El operativo que comenzó este domingo, mientras los funcionarios dominicanos siguen rastreando armas y suministros militares, la investigación comenzó cuando las autoridades iniciaron la revisión de los inventarios en el arsenal.
The Associated Press obtuvo un documento oficial este jueves que arroja detalles sobre la investigación en curso, incluido que los suministros robados fueron vendidos a haitianos, el documento indica que una de las sospechosas arrestadas, una mujer que vive en la provincia sureña dominicana de Pedernales, en la frontera con Haití, está acusada de recibir docenas de cajas de municiones de diferentes calibres que se vendieron por un precio unitario entre 86 y 99 dólares, se señaló que Miguelina Bello Segura las vendió a haitianos que las usarían para cometer delitos.
El documento también indicó que el coronel arrestado, Narciso Antonio Feliz Romero, recibió dinero en efectivo de un oficial que vendió municiones a través de un contacto en Haití.
No se pudo contactar por el momento a los abogados de Bello y Feliz para solicitar sus comentarios.
En general, la red que, según los funcionarios, fue dirigida por Feliz vendió ilegalmente más de 900 mil cartuchos.
Por ahora se desconoce cuántas armas y de qué tipo se vendieron o cuándo comenzó a operar el grupo, los funcionarios no han publicado detalles, ya que afirman que la investigación está en curso.
El presidente dominicano, Luis Abinader, ha criticado durante mucho tiempo la situación en Haití y ha tomado medidas que han desgastado los endebles lazos entre los dos países, entre ellas medidas más estrictas con relación a los inmigrantes haitianos y la construcción de un muro a lo largo de la frontera que ambas naciones comparten en la isla de La Española.
Wilson Camacho, jefe de la fiscalía especializada dominicana que se enfoca en combatir la corrupción administrativa, ha calificado el caso de “extremadamente grave” y dijo que puso en riesgo la seguridad nacional del país.
El año pasado, la ONU publicó un informe que señalaba que la mayoría de las armas y municiones llegan a Haití a través de la República Dominicana y, en cierta medida, de Jamaica.
La violencia en Haití ha aumentado en las últimas semanas, ya que pandillas fuertemente armadas han invadido vecindarios que antes eran pacíficos, lo cual ha obligado al cierre temporal del principal aeropuerto internacional luego de que tres vuelos comerciales fueran atacados.