En un giro inesperado de la política chihuahuense, esta semana el diputado local del PAN, Carlos Olson ha decidido que es hora de poner los autos clásicos en el centro del escenario legislativo. Olvidemos, por un momento, esos pequeños inconvenientes como la salud, la educación o la seguridad pública; ¡lo que realmente necesita el Estado es una ley que rinda homenaje a la cultura automotriz!
El legislador presentó una iniciativa con carácter de decreto para reformar la Ley de Vialidad y Tránsito del Estado de Chihuahua, proponiendo la inclusión de placas de circulación especiales para autos clásicos.
La iniciativa de Olson para implementar placas de circulación especiales para vehículos de época no solo promete “fortalecer la identidad cultural de Chihuahua”, sino también brindar una nueva razón para celebrar nuestras queridas reliquias de motor. Al parecer, el patrimonio automotriz es ahora tan invaluable que merece su propio programa de descuentos, como si se tratara de una especie de Black Friday para coches que ya no aceleran a más de 50 km/h.
Es conmovedor escuchar que los autos clásicos son parte de nuestra historia. Después de todo, ¿quién podría olvidar la época en que las carreteras chihuahuenses estaban repletas de estos magníficos vehículos, mientras que las preocupaciones cotidianas se desvanecían en el humo de sus motores? En un mundo donde las luchas sociales y económicas parecen apremiantes, lo que realmente resuena en el corazón de los chihuahuenses es la conexión emocional con un Dodge de 1975 o un Mustang del 68.
La propuesta de placas distintivas, según Olson, también servirá para que los propietarios de autos clásicos sientan un símbolo tangible de pertenencia. Porque, claro, no hay nada que una más a una comunidad que una chapa de metal que distingue un automóvil del resto de los vehículos en la vía pública. ¿Quién necesita redes sociales o eventos comunitarios cuando puedes tener tu propia placa conmemorativa?
Así que, “aplaudamos” la brillante visión del diputado: en tiempos de crisis y desafíos complejos, al menos nuestros autos clásicos podrán lucir su mejor cara. Después de todo, si hay algo que realmente puede impulsar la competitividad en Chihuahua, son unas cuantas placas brillantes en vehículos que raramente ven la carretera. Al menos esa es la idea del legislador.
