Conseguir boletos para la Fórmula 1 en México es un verdadero desafío. Los boletos se agotan en cuestión de minutos, como ocurrió en el pasado Gran Premio de México, donde se vendieron en solo 30 minutos, dejando a muchos aficionados sin la oportunidad de asistir.
En contraste, en Estados Unidos, donde la Fórmula 1 aún está en proceso de consolidarse, es más fácil encontrar entradas disponibles. Este año, en un esfuerzo por atraer a más público y hacer el evento más accesible, los boletos para el Gran Premio de Estados Unidos se pueden comprar en tiendas Costco, como si fueran tarjetas de regalo.
Por 354.99 dólares, aproximadamente 6 mil 600 pesos mexicanos, los aficionados pueden adquirir entradas que incluyen acceso a los tres días del evento y dos conciertos en Austin, Texas.
Esta estrategia de marketing no solo facilita la compra de boletos, sino que también ofrece una opción más económica comparada con otros Grandes Premios en Estados Unidos, como el de Miami. Al hacer los boletos más accesibles y agregar valor con conciertos adicionales, la Fórmula 1 busca consolidar su presencia en el mercado estadounidense y atraer a una nueva generación de aficionados.
