La ducha es una parte esencial de nuestra rutina diaria, pero ¿alguna vez te has preguntado cómo hacerla más eficiente y beneficiosa para tu piel y cabello? Según el dermatólogo español Sergio Alique García, seguir un orden específico puede mejorar significativamente tu experiencia en la ducha.
Empieza por el Cabello
Lavar el cabello primero tiene múltiples beneficios. Al enjuagar el champú y el acondicionador, los residuos pueden caer sobre tu cuerpo. Si ya has lavado tu cuerpo, estos residuos pueden ensuciarlo nuevamente. Además, el cabello suele necesitar más tiempo y atención, por lo que es mejor abordarlo cuando tienes más energía al inicio de la ducha.
Pasos para una Ducha Eficiente y Saludable
- Lava tu cabello: Aplica champú y masajea bien el cuero cabelludo. Enjuaga completamente y, si usas acondicionador, aplícalo y déjalo actuar mientras sigues con el siguiente paso.
- Enjabona tu cuerpo: Usa un jabón o gel de ducha adecuado para tu tipo de piel. Comienza desde el cuello y baja hasta los pies, asegurándote de limpiar bien todas las áreas.
- Enjuaga el acondicionador: Si aplicaste acondicionador, enjuágalo bien después de haber enjuagado el jabón de tu cuerpo.
- Lava tu rostro: Usa un limpiador facial específico para tu tipo de piel. Es mejor lavar el rostro al final para evitar que los residuos de champú y jabón lo irriten.
Seguir este orden no solo asegura una limpieza más efectiva, sino que también puede hacer que tu rutina de ducha sea más eficiente y agradable, promoviendo un bienestar completo.