Washington.- Un reporte del gobierno del presidente Joe Biden que se publicará próximamente sobre el uso que da Israel a las armas proporcionadas por Estados Unidos en su guerra en Gaza no concluye que el gobierno israelí haya violado los términos sobre su utilización, según tres personas que han sido informadas sobre el asunto.

Se espera que el informe sea duramente crítico con Israel, aunque no concluya que el gobierno israelí haya violado los términos de sus acuerdos de armas con Estados Unidos, según un funcionario estadunidense.

La primera evaluación de este tipo de Washington sobre la conducta de su aliado cercano en la guerra se da tras siete meses de ataques aéreos, combates terrestres y restricciones de ayuda en Gaza de parte de Israel que han cobrado la vida de casi 35 mil palestinos, en su mayoría mujeres y niños.

Una directiva presidencial acordada por la Casa Blanca bajo la presión de los demócratas del Congreso y otros obligó al gobierno a analizar si Israel respeta las leyes internacionales al hacer uso de armas proporcionadas por Estados Unidos y otro apoyo de seguridad durante sus ataques a los palestinos.

Dos funcionarios estadounidenses y una tercera persona informada sobre las conclusiones del memorando de seguridad nacional que presentará el secretario de Estado Antony Blinken al Congreso discutieron el asunto antes de la publicación del informe. Hablaron bajo condición de anonimato porque la información aún no era pública.

Un alto funcionario del gobierno de Biden dijo que se espera que el memorando se publique más tarde el viernes, pero se negó a comentar sobre las conclusiones.

Axios fue el primer medio en reportar las conclusiones del memorando.

Los legisladores y otras personas que abogaron por la revisión dijeron que Biden y expresidentes estadounidenses anteriores han seguido un doble rasero al hacer cumplir las leyes de Estados Unidos que rigen cómo los ejércitos extranjeros utilizan el apoyo estadounidense, una acusación que el gobierno de Biden niega. Habían instado a Washington a tomar una determinación legal directa sobre si había pruebas creíbles de que ataques aéreos israelíes específicos contra escuelas, barrios poblados, trabajadores médicos, convoyes de ayuda y otros objetivos, y las restricciones a los envíos de ayuda a Gaza, violaban las leyes de la guerra y los derechos humanos.

Sus oponentes argumentaron que un fallo de Estados Unidos contra Israel lo debilitará en un momento en que lucha contra Hamás y otros grupos respaldados por Irán. Cualquier hallazgo muy crítico sobre Israel seguramente aumentará la presión sobre Biden para que frene el flujo de armas y dinero al ejército de Israel e incrementará aún más las tensiones con el gobierno de ultraderecha del primer ministro Benjamín Netanyahu por su conducción de la guerra contra Hamás.

Cualquier fallo contra Israel también podría poner en peligro el apoyo a Biden en las elecciones presidenciales de este año por parte de algunos votantes que apoyan fervientemente a Israel.

Israel lanzó su ofensiva luego que un ataque del 7 de octubre contra Israel, liderado por Hamás, matara a unas mil 200 personas. Dos tercios de los palestinos asesinados desde entonces por fuerzas israelíes han sido mujeres y niños, según funcionarios de salud locales. Autoridades estadounidenses y de la ONU señalan que las restricciones israelíes a los envíos de alimentos desde el 7 de octubre han provocado una hambruna generalizada en el norte de Gaza.

Grupos de derechos humanos han acusado desde hace mucho tiempo a las fuerzas de seguridad israelíes de cometer abusos contra los palestinos y han acusado a Israel de no hacer que los responsables rindan cuentas. En enero, en un caso presentado por Sudáfrica, el máximo tribunal de la ONU ordenó a Israel hacer todo lo posible para evitar la muerte, la destrucción y cualquier acto de genocidio en Gaza, pero el panel no llegó a ordenar el fin de la ofensiva militar israelí.

Israel afirma que está cumpliendo todas las leyes estadounidenses e internacionales, que investiga las acusaciones de abuso por parte de sus fuerzas de seguridad y que su campaña en Gaza es proporcional a la amenaza existencial que, según dice, representa Hamás.