En este mes donde se conmemora el Dia Internacional de la Mujer es pertinente mencionar que en los recientes años el género femenino ha ganado terreno en el arte, la cultura, la sociedad y, por supuesto, en los negocios, donde ellas ocupan cada vez más cargos estratégicos o fundan sus propias empresas. Esta redefinición del ecosistema de negocios en México forma parte de un fenómeno global de empoderamiento femenino en los negocios, que hoy celebramos.
Aquí te presentamos unos datos interesantes relacionados con este tema:
En 2018, la participación de empresarias en el mundo aumentó un 6% en comparación con 2017.
Las mujeres en los países pertenecientes a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) perciben 16% menos en su salario que los hombres.
México ocupa el lugar 83 de 135 países en el último reporte de Brecha de Género del World Economic Forum.
Las mujeres en México sólo representan el 16% del sector empresarial.
En México, por cada 10 hombres que inician un negocio, alrededor de 8 mujeres emprendedoras también lo hacen.
Las mujeres destinan más del 70% de sus ganancias a la comunidad y a su familia, en tanto que los hombres sólo inyectan entre 30 y 40% de sus recursos para dichos fines.
De cada 5 PyMES (Pequeñas y Medianas Empresas) que se abren en México, 3 están lideradas por mujeres.
Las mujeres empresarias de México aportan 37% al Producto Interno Bruto, según reportes del INEGI.
La población femenina que solicitó dinero prestado para iniciar su empresa es apenas el 4%, en contraparte el 5% de los hombres lo hizo.
De acuerdo con la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, de cada 100 mujeres que solicitan un préstamo para invertir en su empresa, el 99% salda sus deudas de manera íntegra.
Las mujeres tienen menores tasas de graduación de educación universitaria que los hombres (18% comparado con 21%).
En México la cuota de mujeres que trabajan por cuenta propia es de 21% (mayoritariamente en el sector informal) y la cuota de mujeres que tienen a su cargo a otros empleados es de apenas el 2.3%.
La mayoría de las emprendedoras mexicanas operan en la informalidad, el 60% de esos negocios fue creado por necesidad y no por gusto, en contraparte con los hombres cuya proporción baja hasta 48%.
En México al menos 39 de cada 100 hombres tienen una cuenta en un banco o alguna otra institución financiera, mientras que de las mujeres sólo 32 de cada 100 poseen una.
Sólo 30 de cada 100 emprendedoras se muestra optimista en cuanto al futuro de su negocio mientras que la proporción para los hombres es de 45 de cada 100.
Esta información no es buena ni mala, solamente es real. Es por eso que desde el Gobierno se deben implementar programas que incentiven desde la edad académica hasta la laboral a las mujeres, la OCDE señala que es crucial poner atención en el acceso igualitario a los servicios financieros y los subsidios o apoyos gubernamentales para la población que busca emprender un proyecto.
Las mujeres deben avanzar sin perder de vista cuestiones básicas de negocios como tener un plan de negocio muy claro, analizar el mercado en el que se busca incidir, ser organizada, contemplar los riesgos económicos, buscar capacitación permanente y, sobre todo, tener una actitud valiente y positiva.
Lic. Juan Eleuterio Muñoz