Ciudad Juárez.- Seis meses después de que se reportó la desaparición de Enrique Torres Sabino, hoy su familia obtuvo el resultado de la prueba de ADN que confirma que los restos localizados el 19 de noviembre en el fraccionamiento Hacienda Santa Fe corresponden con su identidad.
Así lo dio a conocer Celina Torres Sabino, hermana de Enrique, quien interpuso el reporte de ausencia luego de que el hombre salió el 1 de junio de su domicilio en el fraccionamiento Las Haciendas y estuvo al tanto de las investigaciones, buscó reuniones con el fiscal y los ministerios públicos, además de participar en manifestaciones para exigir celeridad en el caso.
“Ya salió el ADN de mi hermano, ya fui a fiscalía; hoy voy a regresar otra vez para entregar unos papeles”, compartió Celina.
El mes pasado, la Unidad de Personas Ausentes o No Localizadas, Agentes del Ministerio Público y la Agencia Estatal de Investigación (AEI) realizaron un cateo en la vivienda 1336-38 de la calle Desierto del Carmen en la Hacienda Santa Fe, en donde un binomio K9 localizó indicios de restos humanos; tras una excavación a 73 centímetros de profundidad se localizó la osamenta de la cual no se pudo determinar el sexo en el lugar.
Luego de trasladar los restos a las instalaciones del Servicio Médico Forense (Semefo) la familia Torres Sabino recibió una notificación por la cual se cotejaron datos, pruebas de ADN de la madre de Enrique, de su hermana y de su hija, así como información de la ropa que llevaba puesta.
A finales de noviembre y aún con la espera de resultados, la familia Torres Sabino manifestó su preocupación por que los resultados de medicina forense pudieran extenderse o retrasarse por la temporada vacacional de diciembre.
Un mes después, el ministerio público citó hoy a la familia Torres Sabino para darles los resultados del análisis que confirmó la identidad.
La señora Celina compartió que el proceso ha sido difícil debido a que el primer MP del caso no le presentó avances, pese a que desde las primeras semanas aportaron la información que sirvió para la localización de su hermano.
“El error lo cometieron ellos desde un principio. El primero de junio desapareció, el 3 de junio pusimos el reporte y nos dijeron que si ya habíamos buscado en hospitales, y pues sí, nosotros ya habíamos hecho todo el recorrido y caminamos, fuimos (a preguntar por él) a unas direcciones que estaban en su libreta. Nosotros les dimos todo, las conversaciones de su Facebook, la dirección donde habían visto su auto”, explicó consternada la hermana de la víctima.
Al ser una familia originaria del estado de Oaxaca, aún no tienen definido si contarán con apoyo de la Comisión Local de Búsqueda para el traslado de los restos a su lugar de origen, donde se encuentran su madre, su esposa y sus hijas.