Ciudad Juárez.- “No creo que se desate una cacería de brujas, no hay porqué” expresó Hesiquio Trevizo, vocero de la Diócesis de Juárez, afirmando que no se teme que existan o presenten más denuncias como las hechas contra el sacerdote Aristeo Baca.
Este último presbítero fue detenido la noche del pasado viernes por agentes ministeriales, acusado de los delitos de violación agravada y abuso sexual en contra de una menor de 11 años, en hechos ocurridos en 2018.
El vocero de la Diócesis explicó que los sacerdotes son figuras públicas, de las más expuestas que hay a la ciudadanía, por lo que dijo que se deben de cuidar todos los aspectos.
Señaló que casos como el del padre Aristeo generan consecuencias negativas para la Iglesia, pues parte de la feligresía se aleja de las parroquias, provocando una mayor desunión social.
Ante el cuestionamiento de un caso similar que fuera denunciado anteriormente, Trevizo dijo que se tienen que tomar todas las medidas de precaución en todas las dependencias para evitar que actos como el que se denuncia sigan sucediendo por la grave situación que la ciudad ha pasado.
Negó que la Diócesis tuviera conocimiento de este caso desde antes de que fuera aprehendido el sacerdote, afirmando que este tipo de casos duelen y consternan a la Iglesia.
El vocero católico dijo que el perdón a la familia denunciante va por adelantado, indicando que hasta el momento no han tenido ningún acercamiento con ella.
La segunda audiencia de Aristeo Baca está agendada para el próximo 14 de febrero a las 11 de la mañana, la primera se dio el sábado 9 de febrero de manera privada en la sala número 3, módulo 8 de la Ciudad Judicial por seguridad de la afectada.
