
Berlín.- Una actuación dentro de una catedral católica en Alemania a principios de este mes en la que se mostraron pollos crudos y desplumados envueltos en pañales en el escenario —y el presidente del país y el arzobispo local entre el público— ha llevado a la iglesia y a los líderes municipales a disculparse porque el espectáculo “hirió los sentimientos religiosos”.
El espectáculo, “Westphalia Side Story”, fue parte de una celebración del 15 de mayo para conmemorar el mil 250 aniversario de Westfalia, una región en el noroeste de Alemania.
Las imágenes de video muestran a una mujer y dos hombres sin camisa cantando “Fleisch ist Fleisch” (“La carne es carne”), aparentemente parodiando la canción pop de 1984 de la banda austríaca Opus, “Live is Life”, con guadañas y bailando con los pollos muertos en un escenario frente al altar de la Catedral de Paderborn.
La compañía de espectáculos Bodytalk dijo en un comunicado el viernes que el espectáculo presentó extractos en progreso de “Westphalia Side Story”, que hace referencia al musical estadounidense “West Side Story”.
El espectáculo terminado, que se estrenará en septiembre, formará parte de la programación cultural del mil 250 aniversario.
"No pretendía ser una parodia en absoluto", declaró Rolf Baumgart, cofundador de Bodytalk, en un correo electrónico a The Associated Press. "Dado que Westfalia es una región predominantemente rural con una historia turbulenta, nuestra investigación se centró en eso".
El espectáculo también dio lugar a una petición en línea —firmada por más de 22 mil personas hasta el viernes por la tarde— que solicita al arzobispo de Paderborn, Udo Bentz, una disculpa personal y una penitencia. Los firmantes también exigen que reconsagre la catedral tras ser profanada por este espectáculo.
En un comunicado publicado en el sitio web de la catedral más de una semana después de la actuación, la Asociación Regional de Westfalia-Lippe y el liderazgo de la iglesia dijeron que ni los organizadores ni el lugar conocían el contenido de la actuación.
La catedral, según el comunicado, suele albergar eventos culturales y ha iniciado una revisión interna. También prometieron examinar con mayor detenimiento los eventos propuestos en el futuro.
La oficina del presidente alemán, Frank-Walter Steinmeier, no respondió inmediatamente a una solicitud de comentarios el viernes.