El verdadero destructor (a) de las libertades del pueblo, es aquel o aquella gobernante que le reparte regalos, donaciones y beneficios. Plutarco, filosofo griego.

Actualmente en Mexico, no hay oposición y es urgente crearla volviendo a los origenes de libertad y democracia, para volver a construir el Estado de Derecho, hoy suplantado por un neolenguaje autoritario, dictatorial, como en los mejores tiempos del estalinismo soviético, es por esta razón que la oposición es un conjunto de grupos o partidos que en un país, se oponen a la política del gobierno o el poder establecido.

Ahorita en nuestro país, hay dos realidades, la que dice Claudia desde su pulpito mañanero y la que realmente vive la gente, el pueblo, la sociedad, a la cual también pertenecen los pueblos originarios o indígenas, al no tener un buen y eficiente sistema de salud, ni de educación y lo peor, que tiene olvidado al campo, tal como lo hicieron los sedicentes gobiernos revolucionarios al bajarse del caballo y subirse al Cadilac.

Sin embargo, la doctora que se supone gobierna al “mejor país del mundo”, desde Palacio de Gobierno, no hay un santo día de Dios, que no diga, como el que supuestamente ya se fue, que el país está muy bien, gracias a los aumentos al salario mínimo, a los programas sociales y sobre todo por las remesas que envían los migrantes mexicanos a sus familias y que por eso la “pipol” vive mejor, migrantes a los que la Señora Presidenta con “A” ya los elevó a los altares patrios como héroes y hombres valientes, dando a entender que los mexicanos que viven en la “República del Bienestar”, antes llamada República Mexicana, son cobardes y distan mucho de ser valientes.

Por lo tanto, al no haber una oposición real en Mexico, la 4T, se quedará en el poder por muchos años, hasta convertirse en los nuevos populistas corruptos, en la nueva minoría rapaz, aspiracionistas, clasistas, racistas y crearán otro movimiento o la 5T, con otra visión de gobierno y una nueva ideología que, como todas, solamente sirven para creare otra sociedad a su conveniencia.

Tiempo al tiempo.

Y como colofón, saben ustedes ¿cómo se despiden los químicos? Ácido un placer. Vale.

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