Los malos ejemplos cunden ¿o debería decir las ocurrencias? Esto se lo comento porque ya ve que en un inicio se manejó el tema de la rifa del avión presidencial tan solo como una de cuatro posibles soluciones a la falta de interesados en la compra de la referida aeronave; ocurrencia que por lo descabellado, fue la que más llamó la atención de los medios y de la población en general, quienes rieron en un inicio porque, la verdad, pocos creíamos que eso fuera en serio, lo que sorprendió fue que efectivamente el presidente, López Obrador, estaba hablando muy en serio sobre esa posibilidad la cual ya está en firme y a los empresarios les consta, pues los invitaron a que, si o si, le entraran con por lo menos 20 millones de pesos para financiar los premios en dinero que se van a entregar, porque hay que recordar que se rifa el avión, pero no se rifa y lo que si va a ocurrir es que habrá 100 ganadores de a 20 millones de pesos cada uno; en fin el resto de esto que parece un mal chiste seguramente usted ya se lo conoce.

Pero como le decía los malos ejemplos –ocurrencias- se copian y en este caso, como si ya hubieran dado buenos resultados, pues a decir verdad, esta rifa del avión sin avión, no ha podido cubrir otros temas importantes para los mexicanos; y es que se especulaba que el verdadero propósito de tal ocurrencia era precisamente que funcionara como cortina de humo para tapar otros asuntos verdaderamente importantes y ni para eso ha servido; y pese a ese mal resultado, ya el director del Instituto para Devolver al Pueblo lo Robado (INDEP), Ricardo Rodríguez Vargas, anunció que las subastas que organiza el gobierno de México, utilizarán el mecanismo de las rifas, ello para conseguir más recursos, ya que descubrieron el alto potencial que tienen los sorteos, incluso el funcionario denominó como una ventana de oportunidades el referido procedimiento en el que meterían, sobre todo, los bienes inmuebles, como casas, departamentos o terrenos, los cuales por su alto valor comercial, en ocasiones, no los puede adquirir una sola persona, pero entre varias que compraran los cachitos, la cosa cambia. Según el funcionario, con ello se evitaría vender estos bienes a menos de su valor, pues entre los participantes a las subastas había gente que esperaba a que bajaran de precio los artículos de su interés, para hacer una oferta, pero con la nueva ocurrencia eso ya no pasaría, pues lo que no se venda se rifará y ahí pondrán de todo; casas, coches, joyas, todo lo que no se venda en la subasta. Precisamente ahí entra de nuevo Pronósticos, como un tercero especializado para que les haga los sorteos.

Cierto, parece la continuación de un chiste, pero no es así, la cosa va muy en serio, por lo mismo ya nada nos debe sorprender en esta la 4T, que se ve empeñada en poner en práctica los planes más absurdos, así que no nos queda mas que acostumbrarnos, pero eso sí, no se tiene la obligación se seguirle el jueguito, pues todo indica que las cuentas no les salieron, ya que en campaña, AMLO aseguraba una y otra vez que con el combate a la corrupción tendría el dinero suficiente para todos sus programas clientelares y su obras, cosa que queda de manifiesto no es cierto, ya que de otra forma no tendría que solicitarle a la población y empresarios que paguen otra vez por el avión presidencial, que en esta administración, que se supone que haría las cosas mejor, nos esta saliendo mas caro de su precio original, lo malo es que parece que nadie se da cuenta o no quiere hacerlo, y esa no es la idea

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