Hola, amig@s. Como diría mi tocayo Sabina: ♪♪ Y nos dieron la una, las dos y las tres y nos encontró la Luna ♪♪. En este caso nos dieron uno, dos, tres y hasta el sexto mes, nos encontraron muchas lunas. Para muchos han sido poco más de 180 días del llamado confinamiento social o #QuédateEnCasa, por lo que hemos dicho: “nunca imaginamos que íbamos a vivir tal situación”. Esta experiencia para su servidor sería como para título de una película: El remix de “Lo Bueno, Lo Malo y Lo Terrible”.
Lo Bueno
Es importante verlo por el lado positivo. Para los que tenemos la oportunidad de trabajar desde la comodidad y seguridad de nuestra casa, apoyados por nuestra empresa, una buena experiencia para desarrollar nuestra labor con más tranquilidad, protegiéndonos de la pandemia, para crear e inventar conceptos, mejorar nuestro trabajo y no se diga en nuestra vida personal.
Reorganizarnos, retomar pendientes en nuestro hogar, comunicarnos con nuestra familia y seres queridos, reestablecer contactos con amigos a los que alguna vez dijimos: “al rato te hablo” y no lo hicimos. Valoramos infinitamente los saludos de quien se preocupó por nuestra salud y nosotros por ellos, son algunos aspectos relevantes.
Saber que algunos conocidos se habían contagiado, pero gracias a Dios salieron avante. La solidaridad de aquellos que sí han cumplido con las reglas de higiene al salir; cuidándose y cuidar a los demás. La entrega de todos los médicos y personal que están en la línea de batalla atendiendo a los enfermos de Covid-19 en los hospitales, forman parte de los buenos momentos.
Algo relevante, pero temporal fue observar cómo, por la ausencia de vehículos en las calles, las ciudades limpiaron sus cielos y la tierra tuvo un respiro. Los frentes de nuestras casas y buzones dejaron de ser el basurero de tantos volantes publicitarios.
Para los que contamos con Internet, el surgimiento de la aplicación Zoom nos ha dado la oportunidad de platicar y ver en grupo a familiares y amigos… y lo valioso que ha sido para la impartición de clases y la transmisión de espectáculos y conferencias. Pero lo más importante que se ha dado es que la mayoría reflexionamos y reafirmamos la consciencia sobre la propia salud y tratar de prevenir no solo la pandemia, si no cualquier enfermedad. Queramos o no, ha sido una sacudida a nuestras vidas que debemos tomar en serio y cambiar muchos hábitos para poder entrar a la llamada nueva normalidad.
Lo Malo
El que gran cantidad de personas, empezando por autoridades, no tomó desde el principio el problema con responsabilidad. En el gobierno lo minimizaron como algo pasajero, y por ende muchos ciudadanos no creyeron en lo se convertiría. Se le dio más importancia a los efectos económicos y políticos que al manejo científico de la pandemia.
En el inicio fuimos testigos del absurdo comportamiento de grandes cantidades de personas haciendo compras irracionales de papel de baño y enseres de limpieza, dejándose llevar por rumores nocivos. La ahora llamada infodemia, cargada de memes y videos falsos, llenaron computadoras y las mentes de millones de personas con fake news, que lo único que lograron fue desestabilizar a muchos emocionalmente.
Cientos de teorías sobre el coronavirus, consejos médicos, caseros, milagrosos, “científicos” que solo nos han sembrado incertidumbre. Mensajes de los gobiernos que en vez de ayudar desorientaban.
Primero decían que el cubrebocas no era necesario, después que casi es obligatorio. El confinamiento trajo un cambio de vida en muchas familias al grado de llegar a la violencia, por una desestabilización emocional.
La economía sufrió grandes pérdidas, quiebra de negocios y desempleo. Hemos sufrido el encarecimiento de los productos alimenticios en casi un 20 por ciento, y para aquellos que invirtieron su dinero en cuentas de ahorros o CTS, que se consideran seguras, los rendimientos han caído casi a cero, similares a los de Estados Unidos, en donde no dan nada.
Los estudiantes cambiaron su mundo y los padres también al tener que estar inmersos en Internet desde casa, dejando de lado la convivencia y actividades escolares que son parte fundamental del desarrollo educativo, social y física.
La parte cívica y emotiva de festejos tradicionales se desparecieron del calendario: Semana Santa, Día del Niño, de la Madre, del Padre y fiestas patrias, más las que se acumularon de particulares como cumpleaños y aniversarios.
Fue muy triste saber que localmente se fueron personajes que hicieron mucho por nuestra comunidad y algunos médicos conocidos entregados a su labor, así como enterarnos del deceso de artistas que en su momento nos hicieron disfrutar con su profesión.
Mientras tanto, en lo político se no hizo creer que por fin se iba castigar a políticos corruptos del pasado y solo ha sido un show mediático con fines electorales y distractores de problemas más serios. En verdad que ha sido, como se dice, un 2020 atípico.
Lo Terrible
El haber escuchado frases como: “Tan bien que íbamos”, “Nos cayó como anillo al dedo”, “Vamos bien, ya llegamos a la cima” (esto se repitió cada mes y aún no llegamos). Y la más terrible: cuando Gatell dijo más o menos por el mes de abril: “Lo peor que nos podría pasar es que llegáramos a 60 mil muertes”. El galeno Gatell sigue dando conferencias sin ton ni son cuando van casi 76 mil decesos y esto continúa. Pero eso sí, en las mañaneras nos dicen y presumen que vamos bien.
Pienso que la frase “Nos cayó como anillo al dedo” en verdad podría haberlo sido excelente para que hubiesen demostrado la capacidad de salir de este gran problema, pero no fue así, van casi 76 mil muertes, y según dicen que son mucho más, sin contar con los producidas por la violencia, que tampoco se ha controlado; se necesita mucha frialdad, cinismo e inconciencia para no reconocer la tremenda realidad.
Lo Increíble y Maravilloso
Yo sé que usted amig@ podría agregar más y más detalles en cada uno de los temas que le acabo de presentar, pero no quiero dejar una sensación negativa. Solo piense que si yo le estoy escribiendo, y usted me está haciendo el favor de leerme, es que tenemos la dicha de estar vivos y sanos, que tenemos la oportunidad de reinventarnos en forma positiva para esta nueva realidad, unir nuestro esfuerzo familiarmente, con nuestros amigos, compañeros vecinos buscando una sana convivencia sin bajar la guardia.
El problema aún está latente, de nosotros depende que no siga creciendo. Hay que cuidarnos y cuidar a los demás. No se deje llevar por rumores, fake news; analicemos y usemos el sentido común.
Y recuerden, amigos, que los quiero mucho, pero los quiero sanos.
♪♪ Y nos dieron uno, el dos, el tres y hasta el sexto mes, y en shorts y playera todos los días nos agarró la Luna♪♪