El Senado de México ha aprobado en lo general una reforma constitucional que prohíbe el uso de vapeadores y el consumo ilícito de fentanilo. La iniciativa, que fue presentada por el expresidente Andrés Manuel López Obrador en febrero de 2024, busca modificar los artículos 4 y 5 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos para garantizar la protección de la salud pública. La votación fue de 110 a favor, cinco en contra y dos abstenciones.
La reforma establece sanciones para toda actividad relacionada con cigarrillos electrónicos, vapeadores y demás sistemas o dispositivos análogos, así como la producción, distribución y enajenación de sustancias tóxicas y precursores químicos. Además, se prohíbe cualquier profesión, industria, comercio interior o exterior, trabajo o cualquier otra actividad que refiera el párrafo quinto del artículo 41. Esta medida busca combatir el uso de sustancias peligrosas como el fentanilo, que es hasta 50 veces más dañino que la heroína.
Durante el debate, algunos senadores argumentaron que la prohibición de los vapeadores podría generar un mercado negro y beneficiar al crimen organizado. Sin embargo, otros destacaron la necesidad de intervenir para proteger la salud de los ciudadanos, especialmente de los jóvenes, cuya edad de inicio en el consumo de nicotina vaporizada ha disminuido alarmantemente.
La iniciativa ahora pasará a las legislaturas estatales para su análisis y posible ratificación. Si se aprueba, se implementarán sanciones y medidas para garantizar el cumplimiento de las nuevas normativas, con el objetivo de eliminar el mercado de vapeadores y cigarrillos electrónicos, así como de combatir el uso ilícito de sustancias como el fentanilo