Ciudad de México. El Senado de México aprobó este jueves la polémica reforma constitucional que desaparece siete organismos autónomos que en las últimas dos décadas han funcionado como contrapesos del Ejecutivo y han garantizado, entre otros, el derecho a la información y a la libre competencia. Ahora sus funciones quedarán en manos de distintos departamentos del gobierno federal.
La propuesta fue avalada por 86 votos del partido oficialista, Morena, y sus aliados, frente a los 42 de la oposición. Los senadores seguían debatiendo por la tarde del jueves detalles de su articulado, aunque, previsiblemente, el texto saldría adelante sin cambios.
Con el visto bueno de la reforma en las dos cámaras del Congreso, ya solo quedaría que la iniciativa sea ratificada por una mayoría de los parlamentos locales para que entre en vigor, algo que se prevé sea igual de rápido que en reformas constitucionales anteriores porque el oficialismo controla 24 de los 32 estados del país.
La iniciativa, una más del paquete que impulsó el expresidente Andrés Manuel López Obrador meses antes de acabar su mandato en septiembre, ha generado preocupación entre especialistas, activistas y el sector empresarial.
Según sus críticos, supone un nuevo golpe a los mecanismos de contrapeso al Poder Ejecutivo que tenía México y, al igual que con la reforma al Poder Judicial, creen que debilitará la democracia y limitará las acciones para combatir la corrupción, vigilar la competencia y el diseño de políticas públicas.
Los organismos que desaparecen son el Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI); una entidad que medía la pobreza en el país, otra que analizaba los niveles de educación y organismos que regulaban el sector de la energía, los hidrocarburos, las telecomunicaciones y la libre competencia.
Todas estas funciones serán asumidas por distintos departamentos de gobierno pero hasta que no se publiquen las leyes secundarias y las estatales no estará claro cómo funcionará el nuevo entramado.
Para evitar que la eliminación de la comisión que regulaba la libre competencia y del instituto de telecomunicaciones pudiera suponer una violación al Tratado de Libre Comercio entre México, Estados Unidos y Canadá, el gobierno anunció que se creará una nueva entidad con “independencia técnica”, que es lo que está obligado a garantizar México a sus socios norteamericanos.
El principal argumento del expresidente López Obrador y de la actual mandataria Claudia Sheinbaum para eliminar todos estos organismos fue el ahorro de fondos y poder profundizar la lucha contra la corrupción. Esta misma semana, Sheinbaum cuestionó duramente a los miembros del INAI, acusándolos de supuestos actos de nepotismo y corrupción.
“Va a haber más transparencia ahora, pero no va haber corrupciones”, aseguró Sheinbaum.
