Ciudad Juárez.- El Miércoles de Ceniza, con su mensaje de esperanza y conversión desde la fe, fue vivido por al menos un centenar de personas privadas de la libertad (PPL) que profesan la fe católica, quienes participaron hoy de la misa y en las ceremonias de imposición de ceniza en el Centro de Reinserción Social (Cereso) No. 3 en Ciudad Juárez.
Con sus atuendos en color gris, algunos con rosarios elaborados de hilos o chaquiras de colores, misal o biblia en mano los reclusos que han mostrado buen comportamiento e interés por vivir su fe, acudieron con fervor a la capilla dedicada a San Maximiliano María Kolbe, que se encuentra del Centro de Reinserción, en donde escucharon misa y recibieron el signo de la ceniza en la frente, que representa el arrepentimiento por los pecados cometidos.
La Subsecretaría de Sistema Penitencia y Reinserción Social informó a Netnoticias que el Cereso No. 3 cuenta actualmente con una población de 4 mil 352 hombres detenidos por diversos procesos penales; las instalaciones cuentan con una iglesia católica y una cristiana, así como otros espacios religiosos conforme a otras creencias con menor población de fieles.
El Centro de Reinserción forma parte de los sitios que visitó el papá Francisco en su histórica visita a ciudad Juárez en febrero del año 2016, en donde se reunió con la feligresía integrada por personas privadas de su libertad, tanto del Cereso varonil como femenil; custodios; y personal de distintas áreas operativas que se concentraron para escuchar el mensaje.
La visita del Santo Padre ocurrió con motivo del Jubileo de la Misericordia, en ese momento les dirigió un mensaje a los reclusos: “Deseo que cada uno de ustedes, con la bendición de la Virgen y contemplando la fragilidad en Cristo, que se hizo pecado, se hizo muerte para salvarnos, sepan sembrar semillas de esperanza y de resurrección”.
“Celebrar el Jubileo de la misericordia con ustedes es recordar el camino urgente que debemos tomar para romper los círculos de la violencia y de la delincuencia (…) Nos hemos olvidado de concentrarnos en lo que realmente debe ser nuestra verdadera preocupación: la vida de las personas”, dijo el Papa Francisco.
La Pastoral Penitenciaria, un movimiento dentro de la iglesia católica tiene la misión de infundir esperanza entre las personas que se encuentran bajo arresto, para que en esa condición de vida puedan encontrar la reconciliación y arrepentirse de sus faltas a la sociedad. En esta frontera brindan acompañamiento a hombres del Cereso No. 3; el Cereso femenil No.2; y el Centro de Reinserción Social para Adolescentes Infractores (Cersai).
Hoy el equipo de la pastoral de la Diócesis de Ciudad Juárez, realizó su visita semanal al Cereso No. 3 en donde celebró dos eucaristías, una en la capilla y otra en el centro de oración, para posteriormente hacer un recorrido por las áreas uno, dos, tres y cuatro en donde se hizo una ceremonia de imposición de ceniza.
El padre Carlos Reza García, responsable de la Pastoral Penitenciaria, compartió con NetNoticias que cuentan con agentes de la feligresía que llevan más de 30 años visitando la cárcel, quienes han trabajado con las distintas poblaciones que han transitado por el Cereso durante ese tiempo, llegando a construir una comunidad católica que ronda los 100 feligreses.
“Como dice la palabra de Dios, todavía es tiempo para ellos, que por equis motivo cometieron un error, un delito, pero que Dios se fija misericordiosamente en ellos y los invita a transitar un camino de conversión; a ellos con un camino de esperanza, de saber que pueden ser hombres, mujeres y jovencitos nuevos y tener una vida nueva. Con la Cuaresma, es como si todo empezara de nuevo, porque Dios confía plenamente en nosotros”, aseguró el líder religioso.