Ciudad Juárez.- Un niño de tan solo 10 años de edad observó cómo su padre fue atacado a balazos por dos hombres que sin contemplación alguna le dispararon hasta dejarlo sin vida, justo cuando toda la familia salía de casa a pasear.
Ahora, el pequeño debe recuperarse, no solamente del golpe emocional al presenciar tan terrible escena, sino que, a consecuencia de los disparos, los cristales de la camioneta en la que viajaban le provocaron varias cortaduras en el costado izquierdo de su frágil cuerpo.
En el asiento del copiloto viajaba su madre, de igual forma sumergida en el pánico, pero aún así llamó al 911 para solicitar auxilio pues por un lado veía a su hijo sangrar, pensando lo peor y por otro contemplaba a su esposo en el suelo.
Dijo que en cuanto se fueron los sicarios gritó por ayuda al ver a su cónyuge en esas condiciones y a su niño asustado, llorando y herido.
Ella narró a los agentes policiales que apenas salían de su vivienda, estaban cruzando el portón cuando de pronto los tripulantes de un vehículo se les emparejaron, dos de ellos descendieron y se fueron directamente hacia su compañero de vida, a quien le dispararon a quemarropa.
Identificó a la víctima como Francisco Amado C., de 47 años de edad, mientras que su niño fue llevado a ser atendido a un hospital.
El trágico suceso tuvo lugar en el cruce de las calles Acuario y Sabino Solís, de la colonia Loma Blanca, poco antes de las 5:00 de la tarde de ayer.
Habían transcurrido algunos minutos cuando llegó la madre del fallecido, quien no daba crédito al observar a su hijo tirado en el suelo inerte y sangrante, aún así ella le gritaba, le hablaba por su nombre y le pedía que la llevara con él.
Al observar el arribo de decenas de policías, soldados y elementos de la Guardia Nacional, la dolida madre exigía que más allá de hacer montón fueran a buscar a los responsables de matar a su hijo o de nada servía su presencia en el lugar.
Hasta el momento, no se reporta la detención de ninguna persona relacionada con el crimen. Hoy mismo les entregarán el cuerpo de Francisco para que procedan a su sepultura.
