Mujer que abre cancha: Karla Ruiz
Foto: Antonio Calleja | Karla Ruiz

Si alguien sabe lo que es trabajar duro por su derecho a hacer lo que le gusta, es ella, que desde pequeña se ha esforzado para abrirse campo en un mundo dominado por los hombres, en el que no solo demostró ser capaz, si no que alcanzó los lugares más exitosos.

Al día de hoy, Karla Ruiz es maestra de un grupo de 1ro de primaria y da clases particulares de natación y lectoescritura, pero su historia no es tan sencilla.

Karla no solo es una profesional con licenciaturas y maestrías, es una de las deportistas más destacadas que ha dado Chihuahua en uno de los más “masculinos” universos: el futbol.

“Mi deporte favorito era el basquetbol y aunque tenía mucha habilidad y energía para desenvolverme en él, no pude conseguir un lugar para jugar con las Adelitas de la Universidad Autónoma de Chihuahua (UACh), ¡por la estatura! Me presenté a la práctica de selección y me faltaron unos centímetros, así que no pasé la prueba por ese detalle”.

“Mi papá quería ser futbolista, mi abuelo fue boxeador, así que el deporte era algo cotidiano en mi casa, practiqué todos ¡y en todos soy buena!” me presume y le creo. “Cuando salí de la cancha de basquetbol, triste por el rechazo, vi que estaban unas chicas jugando futbol, el partido estaba 12 a 0 y pedí la oportunidad de entrar y remonté el marcador, un visor de la universidad que estaba presenciando el partido me vio y me invitó al equipo femenino de futbol de la UACh”.

“Siempre había jugado con hombres, así que lo hacía con mucha energía y fuerza, eso me distinguió, ¡tenía 15 años! En la UACh me ofrecieron una beca hasta la maestría y otra beca que utilizó mi hermano, así que, aunque el futbol no era mi deporte favorito, me dediqué a él, porque fue el que me dio las armas para salir adelante”.

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Antonio Calleja | Karla Ruiz

Seleccionada y Campeona Nacional

“No fue fácil, porque no deja de ser un deporte eminentemente masculino, pero sobresalí lo suficiente como para ser convocada a la Selección Chihuahua, donde el entrenador de la Selección Nacional Femenina de Futbol, Leonardo Cuéllar me ve jugar y me convoca a la Nacional”.

“Durante mi paso por la Selección Chihuahua fuimos campeonas nacionales por primera ocasión en la historia del futbol femenino chihuahuense, en 2006, 2007 y 2008, los trofeos se encuentran en el Salón de la Fama” y reflexionamos que pese a que las futbolistas mexicanas han tenido muchos triunfos, sigue existiendo un “techo de cristal”, donde no obtienen el reconocimiento merecido y ni los clubes, las marcas o televisoras, les otorgan los beneficios económicos de los de la liga varonil goza, “cuando los equipos masculinos viajan, les pagan hoteles con instalaciones de lujo, uniformes, viáticos y salarios muy competitivos, en el caso de las mujeres debemos buscar patrocinios particulares para poder costear los gastos básicos, la cuestión de género en el futbol sigue siendo tema delicado y también está el tema de que antes el deporte se practicaba por amor, hoy es todo un negocio”.

Más allá del futbol

Con esos antecedentes, sabía bien que del futbol no iba a vivir, así que debía tomar decisiones sobre su futuro, “desde los 16 empecé a trabajar como instructora de natación en cursos de verano, actividad que aún practico, luego cursé la licenciatura en Educación Primaria, estuve por ocho meses dando clases en la sierra, fue una gran experiencia, ¡estaba a 18 horas de Chihuahua! Pero la violencia se recrudeció y tuve que regresar y me mandaron a Juárez en 2010, desde entonces este es mi hogar”.

Como buena mujer hambrienta de saber, también cursó una licenciatura en Educación Física y una maestría en Educación Especial.

“Sobre el futbol femenino actual, en Juárez las personas tienen la vista puesta sobre el equipo de las Bravas, porque su club está en Primera División, pero hay más alternativas para que niñas y jovencitas interesadas en este deporte puedan entrenarse, por ejemplo, existe el club La Tribu, que es un centro deportivo de alto rendimiento, filial de Pumas en Tercera División, del que fui Coordinadora hace poco”.

“Llegué a La Tribu con la finalidad de becar a niñas que practicaran futbol, empecé con solo cuatro, a los meses ya eran 16”.

Las aulas, su fortaleza para la igualdad

“Los estereotipos siguen imponiéndose y no es ‘bien visto’ que las niñas jueguen un deporte ‘de niños’, ha habido poco avance en este campo, aunque hay más apertura, los maestros debemos apoyar a las niñas que muestran interés por el futbol”, y reconoce que hay cambios interesantes en los reglamentos que han dado paso a que, por ejemplo, más mujeres sean árbitros, pero aún falta mucho por hacer.

Con base en su experiencia como maestra y deportista, le pregunto sobre cuál sería el papel de los padres en el desarrollo de las y los niños en un ambiente igualitario, “los padres de familia deben inculcar en sus hijos el hábito y el gusto por el deporte, les invito a que incluyan en las actividades vespertinas de sus hijos, la práctica de algún deporte, los niños necesitan aprender reglas, estructuras, resiliencia y empatía, aprender a adaptarse a los cambios y el deporte enseña eso y más”.

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Antonio Calleja | Karla Ruiz

¿Qué queda aún en la lista de lo que desea hacer Karla?

“Me gustaría poder organizar campamentos de verano a través del Sector Salud y la Coordinación General del Deporte, donde se enseñe y practique el deporte enfocado a valores y con ello lograr el rescate de espacios públicos; estoy convencida de que, si se genera la práctica sistemática del deporte en áreas consideradas ‘puntos rojos’ de nuestra sociedad, se puede lograr que niños, adolescentes y jóvenes, cambien su destino. Juárez tiene un alto potencial para el deporte y no se está dando el apoyo para detonarlo”.

“Tenemos que enseñar a los niños que todo lo que soñamos está ahí y lo podemos lograr y que siempre tenemos que dar el 100 por ciento en todo lo que hacemos, porque a veces no sabemos qué ojos nos observan, somos inspiración para otros”.

Me quedan muchas cosas en el tintero acerca de esta gran mujer, sobre su trabajo docente y su aportación a la educación especial local, pero es que el futbol es pasión, así que ese tema nos llenó el espacio, espero exista otro momento para hablarles más de Karla Ruiz, porque hay mucho que hablar sobre ella y su sueño de lograr la equidad en ese deporte y que el mismo sirva, entre otros, para guiar a la juventud.

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