
Ciudad Juárez.- Recién cumplidos los primeros 100 días de la presidencia de Donald Trump en Estados Unidos, en el lado mexicano de la frontera ya se pueden observar los principales efectos de la todavía reciente política binacional estadunidense. Desde el marcado descenso en el número de cruces ilegales, hasta la permanencia de programas anteriores como “Se Busca Información”.
El primero de los cambios ocurrió el mismo 20 de enero, apenas minutos después de que el mandatario fuera juramentado como el 47.º presidente de la Unión Americana: la eliminación de la aplicación CBP One, cancelando e inhabilitando toda cita para los migrantes que buscaban asilo a través de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza.
La reducción de los cruces ilegales
De acuerdo con cifras proporcionadas por CBP, desde la toma de posesión hasta finales de marzo se han detenido apenas 8 mil 599 migrantes. Esta cifra representa una disminución del 88 por ciento en comparación con los primeros tres meses del año pasado. Marzo fue el mes con menos actividad, según la corporación, con apenas mil 627 aprehensiones.
Cabe señalar que las labores de CBP se realizan en coordinación con el ejército estadunidense, particularmente con las fuerzas de la Guardia Nacional de Texas, a las que se les otorgaron facultades para detener, procesar y posteriormente deportar a quienes crucen de manera ilegal.
“Los elementos de la Guardia Nacional de Texas ahora son parte de la misma fuerza junto con nosotros. Van a colaborar a la par para garantizar la seguridad de nuestra frontera en El Paso”, declaró el jefe de la Patrulla Fronteriza, Walter Slosar, el pasado mes de febrero.
La incorporación de elementos militares ha traído también el uso de vehículos poco comunes en la custodia del muro fronterizo. Tal es el caso de las unidades denominadas “Stryker”, tanquetas que generalmente se utilizan en zonas de combate activo, junto con una variedad de aeronaves que patrullan el cielo fronterizo.
Tierra y aire
El sector de Ciudad Juárez y El Paso es vigilado por la Guardia Nacional del lado mexicano y por la Tercera Brigada de Aviación de Combate de Estados Unidos, con 500 elementos provenientes de Fort Bliss. Forman parte de un mismo operativo: la llamada “fuerza conjunta”, que abarca desde California hasta el último tramo de Texas.
En territorio nacional continúan desplegados 2 mil 400 soldados del Ejército Mexicano, a quienes también se les atribuye la disminución en los cruces ilegales hacia Estados Unidos. Del otro lado del muro, están apostados otros 2 mil 400 elementos de infantería dedicados exclusivamente a la brigada de tanquetas.
“Nuestra meta es vigilar cada pulgada y cada hectárea de la frontera. Desde El Paso hasta Nuevo México, para nosotros todo cuenta y no hay medida que no vayamos a tomar para proteger la frontera”, dijo el coronel de la brigada estadounidense, Robert Harless, en marzo pasado.
Junto con el operativo militar, también se implementaron nuevas medidas de seguridad para los cruces convencionales, tanto a pie como en automóvil, las cuales, pese a generar desconfianza, habían sido poco utilizadas en años anteriores y parecen seguirlo siendo en los primeros meses del segundo mandato de Trump.

La revisión de teléfonos celulares
Con los nuevos estándares de seguridad, el gobierno estadunidense decidió retomar la práctica de revisar teléfonos celulares personales en busca de información que resulte sospechosa o represente un riesgo federal. Aunque esta práctica es poco común, algunos expresan desconfianza ante el operativo.
“Sí, yo ya casi no cruzo a pie, por eso de los teléfonos. Uno no sabe qué le puedan revisar o qué le puedan poner ellos en el celular. En carro es más rápido y no lo revisan tanto”, explica la señora Gloria a netnoticias.mx mientras caminaba por la fila peatonal del puente Córdova-Américas.
Según CBP El Paso, aunque es posible, la revisión de teléfonos celulares es “muy rara” y solo se aplica al 0.1 por ciento de los viajeros; es decir, solo una de cada mil personas que cruzan hacia territorio texano.
En lo que respecta a los cruces en automóvil, desde enero se han registrado poco más de un millón 800 mil cruces y, según las autoridades del estado de Chihuahua, no se espera que esta cifra disminuya considerablemente en los próximos meses.
“No hemos visto grandes cambios. A veces los cruces se vuelven lentos por alguna revisión de CBP, pero todo se regulariza. Hay etapas, como en enero, donde sí baja un poco la actividad, pero nada fuera de lo normal”, explicó Rogelio Fernández Irigoyen, director del Fideicomiso de Puentes Fronterizos de Chihuahua.
Se sigue buscando información
En contraste con todos los cambios, permanecen vigentes programas de seguridad conjunta considerados esenciales, como es el caso de 'Se Busca Información'.
Presentado en 2023 por CBP y la Fiscalía General del Estado de Chihuahua (FGE), este programa, diseñado para capturar a los 10 más buscados de la frontera, sigue activo pese a la incertidumbre generada en enero pasado.
La última captura realizada gracias a los esfuerzos del programa binacional fue la de Leonel Sala Favela, alias “El Sobrino”, arrestado en el estado de Durango. Estaba ligado al Cártel de Sinaloa y era buscado en Estados Unidos por el delito de secuestro agravado.
A la fecha, 'Se Busca Información' ha contribuido a la captura de 19 de los más buscados en esta región. No obstante, sigue pendiente la localización del único fugitivo de origen estadunidense: Alberto Macías, originario de Houston, Texas, y perseguido por el delito de agresión sexual contra menores de edad.
