Ciudad Juárez- De pequeña quería ser actriz y la vida la tomó de la mano, llevándola por caminos completamente diferentes, pero más emocionantes y satisfactorios.
“Era muy mandona, independiente y curiosa, siempre la líder”, ser la mayor de cinco hermanos le dieron a Liz Pasillas un campo de acción interesante para ejercitar esas capacidades que la prepararían para estar hoy en día al frente, junto a su esposo, de una de las empresas locales de desarrollo tecnológico con mayor impulso.
“Yo quería estudiar teatro, pero la vocación familiar ganó, los negocios y el comercio se volvieron mi área de desarrollo y comencé a estudiar Administración Financiera, en esa época que conocí a Jon”, un estudiante de Ingeniería en Sistemas venezolano que le dio un giro completo a su vida.
“Cuando me casé con él, empecé a experimentar otros aspectos de la vida y pude retomar aquella vocación infantil de hacer teatro, porque estaba comenzando a realizar cortometrajes en los que actué, en ese proceso descubrí otras actividades que me interesaron y comencé a apoyarlo en la producción de su trabajo cinematográfico”.
De Nueva York a Miami
“Poco después, nos fuimos a estudiar a Nueva York, él cine y efectos especiales y yo inglés, al terminar nos mudamos a Miami, a seguir preparándonos. Ahí le ofrecieron empleo a Jon y aproveché para estudiar actuación y las cosas se dieron para comenzar a desempeñarme como creadora de contenido en una cadena de televisión, incluso tuve un programa que se llamaba ‘El Secreto Detrás de Cámaras’. Fue entonces que creamos nuestra primera empresa, una casa productora y creadora de contenidos, de ahí resultaron productos que fueron a festivales, cosas para HBO y Prime Video, entre otros”.
“Ese viaje duró ocho años, durante los cuales decidí estudiar Producción, pero me di cuenta que, con lo que Jon me había enseñado y la experiencia en el trabajo de ese tiempo, ya había aprendido lo que necesitaba saber y mejor me avoqué a desarrollarme como productora en publicidad, TV media y productos digitales”.
En 2019 Liz y Jon regresan a Juárez para renovar sus visas y pasar fiestas de fin de año en ese viaje, el contacto con la familia les hizo sentir la necesidad de quedarse y retomar el arraigo en esta frontera que la vio nacer y los unió.
Emprendedora de realidad virtual
“Entonces conformamos nuestra agencia, New Discovery, en la que tenemos tres campos de acción: Mercadotecnia, dirigida a crear estrategias para el posicionamiento digital empresarial; Contenido Inmersivo, que busca la utilización de la tecnología y la creatividad, para generar productos virtuales y de realidad aumentada para la industria maquiladora, y el tercero, la parte fílmica, porque nuestro amor por producir cine sigue vigente. Como verás, la innovación es lo que nos mueve”.
En 2020 Liz obtiene financiamiento a través de un estímulo fiscal, con el programa Eká, de la Secretaría de Cultura del estado de Chihuahua, para el desarrollo de un proyecto de realidad virtual llamado “Ruta Norte”, el cual narra, de manera inmersiva, el recorrido de los migrantes para llegar a esta frontera y con ello visibilizar la dura realidad de la migración, este proyecto se presentó exitosamente en las instalaciones del INBA de Ciudad Juárez.
“Hemos encontrado mucha resistencia de los empresarios locales ante el uso de la tecnología, para abrirnos oportunidades, impartimos charlas en universidades, en cámaras empresariales y de comercio, donde explicamos los usos, aplicaciones y beneficios que pueden obtener con estas nuevas herramientas”.
“Debo aceptar que el confinamiento por el covid vino a dar un gran impulso al crecimiento tecnológico, un ejemplo es una reconocida marca que tiene una maquila aquí, a la que en dos años le hemos generado 14 aplicaciones (apps) que han sido de gran impacto en sus procesos industriales, particularmente en el ámbito de la capacitación dentro de su Centro de Entrenamiento Inmersivo”.
Los desarrollos que crean Liz y Jon son en experiencia 360 grados, Realidad Virtual, Realidad Aumentada y Realidad Mixta, y con estos elementos deciden apostar nuevamente en búsqueda de financiamiento en Eká 2022.
“Cuando regresamos a esta frontera, me topo con un Juárez sin marcos históricos ni culturales que nos hagan sentir juarenses, las tecnologías que manejamos normalmente se enfocan a juegos (games) y pensamos, ¿por qué no aplicarla a algo más allá? No queríamos ir por lo turístico, queremos un rescate del patrimonio cultural tangible uniendo el arte con la tecnología”.
'Juárez Aumentada'
“Nos pusimos a desarrollar un nuevo proyecto, al que llamamos ‘Juárez Aumentada’ es un trabajo de realidad aumentada en que se busca que los ciudadanos tengan interacción con el patrimonio cultural en tercera dimensión y lo presentamos ante Eká en 2022, quien nos aprobó su desarrollo con fondos de BRP”.
“En el catálogo de la ciudad se contabilizan 126 monumentos y 60 sitios históricos, de ahí elegimos 40 monumentos y 16 sitios para investigarlos y los estamos capturando con tecnología 3D, para ponerlos a disposición de los juarenses y cualquier persona interesada vía internet, donde podrán no solo apreciarlos, si no compartir sus anécdotas y conocimientos sobre ellos, enriqueciendo permanentemente el proyecto”.
Liz espera poder ir ampliando el catálogo hasta tener todo el patrimonio cultural de Juárez preservado en realidad aumentada, mientras tanto, y para mejorar su trabajo, se ha seguido capacitando en áreas como Gestión de Patrimonio Cultural y en Desarrollo Sustentable.
“Quiero que retomemos también un cortometraje de ciencia ficción que dejamos en espera, vamos a terminarlo. Queremos llegar al momento en que podamos producir un proyecto creativo al año”.
Impulso al deporte
Liz tiene un hermano que fue boxeador profesional y que hoy en día se ha convertido en promotor deportivo, buscando impulsar el talento local, esta empresa empezó a crecer y ella ha tomado parte del trabajo: la publicidad y promoción y la producción de eventos.
“Buscamos que la Promotora genere un crecimiento integral de nuestros boxeadores, cuidarlos. Para nosotros el respeto al deporte es primordial. Abrimos también un gimnasio en la Colonia Sara Lugo, conocida como Ladrillera y en el que brindamos becas a niños deportistas. Ya hemos conseguido tres títulos mundiales y contratos con cadenas televisivas nacionales e internacionales para transmitir las peleas”.
“El trabajo no es solo mío, he estado en el lugar correcto que me ha permitido explorar esa voz interna que me lleva a crear. Mi esposo Jon es mi gran pilar, entre nosotros no existe el ego, él no solo me apoya, se alegra de mis triunfos y eso me motiva a seguir adelante”.
Cuando le cuestiono por esa sonrisa permanente y el brillo de sus ojos, simplemente responde: “Eso para cuando uno ama lo que hace”. —Y sé que eso, es verdad—.
