Ciudad Juárez.- Los cientos de migrantes que se encuentran durmiendo a las afueras del Puente Internacional Zaragoza, afrontan ahora el reto de mitigar el frío que se ha registrado en la ciudad.

"La necesidad puede más que el frío", expresó un migrante entrevistado por NetNoticias, cuando se le cuestionó sobre si pese a las bajas temperaturas continuará viviendo en las banquetas de este cruce.

"Con lo que sea sobreviviremos el frío, vamos y agarramos de los botes de basura hules y cartones para ver que podemos ponerle aquí para que no esté tan helado", añadió apuntando a las carpas que ha logrado montar y reforzar con diferentes cosas para que la lluvia y el frío afecte lo menos posible.

Por otra parte un hombre originario de Michoacán, quien no quiso dar su nombre, explicó que la mayoría de los que viven en las aceras de este puente, compraron algunas lonas para cubrirse de la lluvia que se registró en pasados días.

Indicó que se organizaron para poner las lonas y buscar cubrir casi todo por donde el agua y al frío puedan entrar.

Compartió que la noche de ayer y la mañana de este sábado algunas agrupaciones religiosas acudieron al lugar a regalar burritos, cobijas y ropa abrigadora.

Sin embargo dijo, no han sido suficientes para lograr cubrir a todos los que están esperando a ser llamados por la autoridades de Estados Unidos.

Compartió que en la noche la cantidad de migrantes en este lugar es menor, pues muchos se van a diferentes lugares a dormir como a casa de familiares o amigos.

Otro migrante contó que fue a una tienda de autoservicio cercana a pedir una lona en la que anunciaban algunas ofertas, pues se percató que la estaban retirando y vio la posibilidad de reforzar su casa de acampar con esa lona.

Comparte que hasta el momento no existen conflictos entre los migrantes y que no ha ocurrido algún hecho de inseguridad entre ellos pues agradecen que durante todo el día y noche haya presencia de la Policía Municipal.

Los migrantes entrevistados se dijeron dispuestos a seguir en esperando en este lugar y en esas condiciones hasta ser llamados, pues dicen no perder la esperanza de ser recibidos en el vecino país.

Señalan que ya muchos de ellos se encuentran sin dinero por lo cual en ocasiones piden a quienes esperan en las filas del puente o bien hacen favores a comerciantes y en casas cercanas, a cambio de dinero o algún alimento.

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