Ciudad Juárez.– En el cruce de la avenida 16 de Septiembre y la calle Níquel, en la colonia Arroyo Colorado, permanece cerrada y con visibles signos de deterioro la funeraria del Carmen, la cual fue suspendida desde el pasado 13 de marzo. Esta situación ha generado inconformidad entre varias familias, que acusan irregularidades y falta de respuestas por parte de los responsables del establecimiento.
Cristina Uribe, sobrina de Antonio Uribe García, relató que su familia pagó por un ataúd metálico, servicios fúnebres y panteón, pero nunca recibió la papeleta correspondiente, a pesar de que su tío fue trasladado del Hospital General al crematorio. Desde entonces, su tía Carolina Ramírez ha intentado obtener información con Nancy Arriaga, quien asegura estar gestionando trámites ante el Registro Civil, sin que haya avances ni un interés aparente en resolver el problema.
El caso de esta familia se remonta a la época del covid, cuando falleció su ser querido, y desde entonces no han recibido una respuesta clara sobre el destino de sus restos.
Trabajadores de la funeraria señalan a Manuel Arroyo y José Arriaga como los verdaderos dueños del establecimiento, quienes, según denuncian, no han dado la cara ante las familias afectadas. La empresa ha justificado la falta de documentación argumentando que su antigua sucursal se incendió hace tres años; sin embargo, los afectados desconfían y temen ser víctimas de un posible fraude, especialmente tras el reciente hallazgo en el crematorio Plenitud, el cual, según las autoridades, habría entregado cenizas falsas a decenas de familias.
Las familias piden la intervención de las autoridades para que se agilicen los procesos en la Fiscalía y el Registro Civil, ya que aseguran que hasta ahora no se les ha brindado información clara. Señalan que la única forma de obtener justicia es visibilizar su caso y presionar a través de los medios de comunicación, para evitar que estas prácticas continúen afectando a más personas.