Ciudad Juárez.- Al ser una de las 100 ciudades que participó con un proyecto para la promoción del tránsito peatonal en el Centro Histórico, Ciudad Juárez resultó seleccionada para una acción de intervención comunitaria que plasmará una senda colorida en un área de la Zona Centro.
Daniela González Lara, coordinadora de Asesores del Municipio presentó la iniciativa de Public Art, a la cual accedió el Municipio en colaboración con Fundación Placemaking México y Fundación Bloomberg de Estados Unidos, quedando seleccionada entre las cuatro ciudades del país.
“Es una gestión, que no le cuesta un solo centavo a los juarenses. La coordinación de asesores trabaja con dependencias municipales, aliados del Centro Histórico: Servicios Públicos Municipales y la Dirección de Vialidad. Este proyecto tiene como objetivo la pacificación del Centro Histórico, es un programa piloto”, dijo González Lara.
La intervención de urbanismo táctico cuenta con un diseño de Biznagas en color verde que contrastan con un fondo geométrico en tonos cálidos, cuáles harán la zona peatonal de la intersección de la calle Ignacio Mariscal y avenida Vicente Guerrero.
Sebastián Cuevas, director de “Otra Ciudad A.C.” y diseñador del modelo que se está implementando en la frontera, es arquitecto originario de Chile y colabora con un equipo de expertos, quienes consultaron a la población que habita y transita dicho espacio público, logrando obtener la conceptualización de un espacio con vegetación del desierto.
Juárez como una de las cuatro ciudades elegidas en México: Puebla, Mazatlán y se posiciona para crear cruces seguros, desde la intervención comunitaria y la habilitación de espacios seguros, al invertirse 25 mil dólares en el estudio de campo, la delimitación del área para que ya no sea transitada por vehículos, y solo sea de acceso peatonal, así como la intervención artística.
Durante el fin de semana iniciaron los trabajos en la zona, con la limpieza y aplicación de praimer en colaboración con Servicios Público; se estima concluir e inaugurar la obra el primero de septiembre.
Sin embargo, al ser una superficie por la cual transmitirían los peatones y se encuentra expuesta a la intemperie, la durabilidad se estima de ocho a 10 meses, por lo que requerirá mantenimiento para su conservación, explicó Cuevas.
