Ciudad Juárez.- El cambio climático afecta cada vez más al municipio de Juárez. De acuerdo con los pronósticos a largo plazo, la acumulación de lluvias será por debajo de lo normal al menos en los próximos tres meses, considerando el promedio estadístico de los últimos 30 años, explicó Adrián Vázquez, director del Departamento de Meteorología y Energías Verdes de la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez (UACJ).
"Vamos a tener un año, por lo menos, tan seco como el año pasado. Típicamente, los años con el fenómeno La Niña tienden a fortalecerse entre septiembre y diciembre, pero debido a la reducción de la temperatura del mar, para mediados del verano estará instaurada”, explicó.
“Las condiciones de La Niña tienden a generar una menor precipitación en nuestra región; aquí llueve menos cuando hay La Niña y también se reducen los huracanes del Pacífico, cuyas colas a veces nos permiten llenar las presas. Ahora dependemos de los huracanes del Atlántico para que nos traigan algo de humedad", agregó el especialista.
Calor cuando debería haber frío, tolvaneras lejos de Semana Santa y una ausencia de nieve que antes enfriaba los inviernos son entre otros fenómenos, lo que a los fronterizos alerta de que el medio ambiente está cambiando.
Para el doctor Vázquez, estos cambios hablan de un clima menos hospitalario y más difícil para vivir en la frontera.
“Cambios como estos han propiciado que la gente busque más detalles de lo que está sucediendo con el clima y aprender más términos que le ayuden a entender por qué las condiciones meteorológicas de la ciudad”, aseguró.
Uno de los ejemplos de cómo la gente ha buscado aprender, se refleja en la preocupación por fenómenos que siempre han existido, pero de los que hoy se conocen más debido a los efectos climáticos que generan: las ondas de calor.
Una de las cuestiones que en el norte se maneja con mayor regularidad es la forma de definir un episodio de onda de calor, como el diferencial o rango existente entre la temperatura mínima y máxima del clima.
“Una mínima superior a los 25 grados y una máxima superior a los 38 grados, es decir, si se dan estas dos condiciones durante tres días seguidos, constituye para nosotros un episodio de onda de calor. Nosotros, estadísticamente, tenemos unos cinco a 10 episodios”, explicó.
“Lo que nos hace mucho daño en Juárez es que a veces no tenemos tantos episodios, pero son muy largos. Duran más de tres días. En 2016, tuvimos uno registrado que duró casi 15 días de onda de calor en estas condiciones. El hecho de que no nos enfriemos suficientemente genera estrés, y esto puede desencadenar problemas de salud, algunos ya existentes o en poblaciones vulnerables, y puede complicar la salud", detalló el experto.
Estos fenómenos y climas con temperaturas extremas se han vuelto comunes para los fronterizos. El viernes fue un ejemplo de días con tolvaneras y vientos de alta velocidad no comunes en la temporada.
De acuerdo con los pronósticos de la Coordinación Estatal de Protección Civil, los vientos continuarán este sábado 8 de junio.
Vientos con rachas de 50 a 70 kilómetros por hora y posible formación de torbellinos o tornados: Chihuahua, Durango, Coahuila, Nuevo León, Puebla y Tlaxcala; con tolvaneras: Baja California, Baja California Sur y Tamaulipas.
La autoridad hizo las siguientes recomendaciones para este clima:
Las medidas preventivas de seguridad incluyen:
- Evitar salir si no es necesario, y en caso de hacerlo, informarse de las condiciones meteorológicas de la zona a la que se va a dirigir.
- Asegurar láminas, techos, malla sombra, puertas, ventanas u objetos que no estén debidamente sujetos.
- Verificar y reforzar las condiciones de bardas de la vivienda que se pudieran caer.
- Tomar precauciones delante de edificaciones en construcción o en mal estado físico, así como evitar encender fogatas y no arrojar colillas de cigarro.
- Al transitar en calles o avenidas, alejarse de cornisas, muros o árboles que pudieran desprenderse.
- Conducir con precaución y encender las luces intermitentes en caso de presencia de tolvaneras; si es posible, aplazar el viaje.
- Buscar una zona segura para estacionar mientras pasan los fuertes vientos.
