Ciudad Juárez.- La fronteriza Ciudad Juárez se prepara para abrirle las puertas al Estadio 8 de Diciembre en el suroriente, recinto que surgió de un proyecto conflictuado y que marca época en las instalaciones deportivas de la localidad.

El estadio, que lleva por nombre la fecha de fundación de la ciudad, tiene la particularidad de haber nacido como la idea alterna a una arena de rodeo que no pudo ser, y que pese a su naturaleza emergente, tuvo cuando menos un año de planeación.

La obra

Con una inversión de poco más de 57 millones de pesos, las instalaciones de la Avenida Lote Bravo surgieron de la controversial arena suroriente tras las quejas públicas del CBTIs 270 en 2022, ante el entonces intento de obra de 270 millones de pesos. Estos mismos señalaron que resultaba mucho más provechoso para la comunidad del sector un complejo en donde se pudieran practicar deportes populares.

Dicha inconformidad fue escuchada por el Gobierno Municipal, y para mayo de 2023 ya se tenía cuando menos la idea de lo que se quería hacer.

“Tenemos contemplado un estadio. La comunidad del suroriente y los estudiantes tienen razón, tenemos que darles un espacio que les sea de provecho y que lo puedan usar para varias cosas, no solamente como estadio para practicar deporte, pero que lo usen también como centro de reuniones y un punto de convivencia”, decía el director del Instituto Municipal del Deporte Juan Carlos Escalante en mayo de 2023.

Para diciembre pusieron la primera piedra de un estadio que, aunque similar al 20 de Noviembre en sus características, no se ve limitado por los edificios aledaños y saltan a primera vista los tres módulos de gradas con capacidad para 4 mil 056 espectadores y el pasto sintético junto con los 400 metros de la pista de atletismo.

En una primera etapa se removió terracería y se acondicionó el terreno de la colonia Cerradas del Parque, y se dejaron los cimientos para el primer sector de las gradas. De ahí siguió el pasto sintético, los cuatro postes de iluminación y el resto del graderío. La última fase de la obra vio colocarse el tartán de color negro y los postes de gol para el futbol americano.

A menos de 24 horas de su apertura, resulta que la cancha también marca época en la historia deportiva de Ciudad Juárez, siendo el primer estadio construido en más de una década.

El primero en mucho tiempo

Ya pasaron casi 13 años desde que el entonces gobernador César Duarte inauguró el Estadio Juárez Vive (hoy Estadio Juárez), casa de los Indios con 15 mil asientos, y que fue engalanado por Juan Gabriel en aquella primera noche del 18 de noviembre de 2012.

Con el paso de los años, de las temporadas y pese a cobrar relevancia en las últimas épocas como centro de vacunación contra el covid-19 y módulo de plaqueo, las condiciones del lugar no han hecho más que deteriorarse. Los únicos cambios han sido los mínimos requeridos por la Liga Estatal de Beisbol para el terreno de juego. El resto del lugar permanece intacto a reserva de las gradas que cambiaron de color con el último cambio de administración estatal.

Para las autoridades municipales parece quedar claro que el espacio era más que necesario para una ciudad que cada vez tiene más actividad deportiva: con más atletas y con una constante diversificación de disciplinas. Desde las más simples como el futbol y el baloncesto, hasta las recientes en pleno desarrollo como el rugby, la esgrima y el waterpolo.

“Una ciudad como esta, que ha crecido tanto, en donde hay tanto talento, necesita también seguir creciendo en infraestructura deportiva. Esto no va a ser de utilidad nada más para los habitantes del sector, también para la gente que usa el Estadio 20 de Noviembre, porque tenemos una ciudad tan poblada que necesitamos espacios para que todos los jóvenes puedan practicar deporte”, expresó el alcalde Cruz Pérez Cuéllar el día en el que quedó instalada la primera piedra.

A diferencia del Estadio Juárez, el complejo de suroriente sí será inaugurado con una actividad deportiva.

¿Quién juega?

Después de intentar traer a las Bravas de Ciudad Juárez para un partido de postemporada de Liga MX Femenil, y de verse interrumpidos por la gran final del futbol mexicano a finales de año, el partido definitivo verá a un combinado de la sub-19 y sub-17 de los Bravos de Ciudad Juárez, mismo que estrenará cancha ante los Toros del Centro de Proyección y Formación de Futbol Asociación (Ceprofa), pertenecientes a la Liga Premier de la Tercer División Profesional.

De ahí en adelante, el estadio será en espacio público para la práctica del deporte y los certámenes selectivos. Asimismo, no se descarta que le pueda servir de casa a lo que queda de los recién extintos Jefes de Juárez: su equipo de futbol bandera femenil.

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