Nueva Delhi.- La tormenta tropical Dana tocó tierra la noche del jueves a lo largo de la costa oriental de la India, donde las fuertes lluvias y vientos derribaron algunos árboles.
El meteoro ingresó por el estado de Orissa con vientos máximos sostenidos de unos 110 kilómetros por hora (68 millas por hora) y ráfagas de hasta 120 km/h (75 mph) informó el Departamento Meteorológico de la India. Las autoridades declararon a la agencia noticiosa Press Trust of India que se tiene previsto que el proceso de llegada a tierra se extienda hasta el viernes a medida que la tormenta se adentra hacia el norte del estado antes de debilitarse gradualmente en las siguientes horas.
Mientras llegaba a tierra, la tormenta azotó algunos distritos de Orissa y el estado vecino de Bengala Occidental con fuertes lluvias y ráfagas de viento que derribaron algunos árboles, indicó la prensa local. Hasta la mañana del viernes no se había informado de víctimas mortales o daños de importancia.
Los climatólogos afirman que las tormentas severas se están volviendo más frecuentes en el sur de Asia. El calentamiento global impulsado por la emisión de gases de efecto invernadero han provocado que estas tormentas se vuelvan más extremas e impredecibles.
Las autoridades indias comenzaron los preparativos en anticipación a la llegada de la tormenta desde hace varios días. En Orissa, casi 600 mil personas fueron evacuadas de zonas de alto riesgo y se desplegaron varias cuadrillas de rescate y trabajadores de ayuda. Las escuelas fueron cerradas y se cancelaron más de 200 servicios de tren y vuelos desde y hacia las capitales de los estados de Orissa y Bengala Occidental.
Las autoridades estaban en alerta ante posibles daños en tres distritos en Orissa, en donde el servicio meteorológico pronosticó una marejada ciclónica de hasta un metro durante el proceso de llegada a tierra de la tormenta, la cual podría agravar las inundaciones en zonas bajas.
Las costas del este de la India son propensas a la llegada de ciclones, pero el número de tormentas intensas ha ido en aumento en la región. La temporada de huracanes de 2023 ha sido la más mortífera en el país en los últimos años, cobrando 523 vidas y dejando daños por un costo estimado de 2 mil 500 millones de dólares.
