Washington.- La vicepresidenta estadunidense Kamala Harris dijo este miércoles que no está de acuerdo “con ninguna crítica a las personas basada en por quién votan”, después de que el presidente Joe Biden se refiriera a los seguidores de Donald Trump como “basura”.
“Representaré a todos los estadunidenses, incluidos aquellos que no voten por mí”, aseveró la vicepresidenta.
Harris, la candidata demócrata a la presidencia de Estados Unidos, hizo el comentario a los periodistas mientras se preparaba para hacer campaña en Carolina del Norte, Pensilvania y Wisconsin. Sus palabras fueron un intento de atenuar la controversia sobre la retórica de Biden menos de una semana antes del día de las elecciones.
El tumulto empezó el martes por la noche alrededor del momento en que Harris estaba entregando un mensaje unificador en un discurso cerca de la Casa Blanca. Dentro del edificio, Biden criticaba el reciente mitin de Trump en el Madison Square Garden de Nueva York, donde un comediante describió a Puerto Rico como una “isla de basura flotante”.
“La única basura que veo flotando ahí fuera son sus seguidores. Su demonización de los latinos es inconcebible y es antiestadounidense”, dijo Biden en una llamada de campaña organizada por el grupo de defensa hispana Voto Latino. “Es totalmente contrario a todo lo que hemos hecho, a todo lo que hemos sido”.
Biden y la Casa Blanca se apresuraron a explicar que el presidente estaba hablando de la retórica en el escenario, no de los seguidores de Trump en sí. Pero los republicanos aprovecharon los comentarios de Biden, afirmando que eran similares al momento en que Hillary Clinton, cuando era candidata demócrata y se enfrentó a Trump en 2016, dijo que la mitad de los seguidores de Trump pertenecían a un “cesto de deplorables”.
Al atacar a Biden, y por extensión a Harris, los republicanos están pasando por alto la propia historia de Trump de insultos y retórica demonizadora, como llamar a Estados Unidos “un basurero para el mundo” o describir a los opositores políticos como “el enemigo dentro” del país. Trump también ha descrito a Harris como una “persona estúpida” y “muy perezosa” y ha cuestionado si consume drogas.
Trump también ha rechazado las solicitudes de disculparse por el comentario sobre Puerto Rico en su mitin. Reconoció que “alguien dijo cosas malas”, pero añadió que “no puede imaginar que sea un gran problema”.