Cleveland.- El sheriff del condado de Ohio y su pequeño perro policía eran inseparables, sus vidas estaban firmemente entrelazadas.
Por lo tanto, parece apropiado que el alguacil retirado del condado de Geauga, Dan McClelland, de 67 años, y su compañero de lucha contra el crimen Midge, de 16, murieran el miércoles: McClelland, en un hospital después de una larga batalla contra el cáncer y Midge, unas horas más tarde en casa. , quizás de un corazón roto.
McClelland se retiró a fines de 2016 después de 13 años como alguacil en este condado semi-rural al este de Cleveland. Pasó 44 años en total en la Oficina del Sheriff del condado de Geauga y una década junto a Midge, una mezcla de chihuahua-rat terrier que olfatea drogas certificada por Guinness World Records en 2006 como el perro policía más pequeño del mundo.
Él y Midge, pero especialmente Midge, eran estrellas de rock en el condado de Geauga. Dondequiera que fuera McClelland, Midge estaba a su lado. En la oficina, ella dormía la siesta en una cama para perros junto a su escritorio. Los escolares quedaron cautivados durante sus visitas.
El sucesor de McClelland, el alguacil Scott Hildenbrand, recuerda haber conducido un carrito de golf con McClelland y Midge en el asiento del pasajero en la feria del condado de Great Geauga. Dijo que era un viaje lento ya que la gente acudía en masa a ellos, acariciando y preocupándose por Midge.
“Solía bromear que la gente lo veía en un desfile en un automóvil y decía: 'Oye, ahí está Midge y cómo se llama'”, dijo Hildenbrand. "Creo que ella era más popular que él".
El teniente retirado John Hiscox, un antiguo portavoz de la oficina del alguacil, lo expresó de esta manera: "Fue como llevar a Elvis Presley a la mitad del camino".
A pesar de su tamaño, Midge no se quedó atrás cuando se trataba de su trabajo. Fue McClelland quien decidió que Midge, el enano de su camada, sería un perro detector de drogas ideal.
A diferencia de los perros policía grandes y más agresivos, el Midge de modales suaves registraría los vehículos sin romper la tapicería ni dejar huellas de barro. Buscar debajo de los vehículos nunca fue un problema.
Su asociación llevó a apariciones en programas de entrevistas de televisión durante el día y menciones en revistas nacionales, incluida Playboy. Mantuvo sus certificaciones K-9 hasta su jubilación conjunta.
Hildenbrand dijo que se sorprendió cuando McClelland decidió retirarse y comenzar a viajar por el país en un vehículo recreativo con su esposa Beverly y, por supuesto, Midge.
“Pasó 44 años protegiendo a las personas en este condado y, francamente, amaba su trabajo, cada minuto”, dijo Hildenbrand. “Pensé que nunca se retiraría.
McClelland fue un buen líder que siempre tuvo en mente los mejores intereses del condado y la comunidad, dijo Hiscox.
“Fue justo y no tuvo miedo de tomar una decisión”, dijo Hiscox. "Siempre estaba dispuesto a escuchar, pero cuando tomaba una decisión, era definitiva".
La familia dijo que McClelland y Midge serán enterrados juntos.
