Ciudad de México.– El delicado estado de salud de Silvia Pinal en las últimas horas ha llevado a muchos a preguntarse con lo que pasará con su patrimonio reunido a través de años de trabajo en el cine y la televisión, sin embargo, uno de los aspectos que más ha llamado la atención es quién tendrá posesión sobre el cuadro que tiene la primera actriz y que recibió de manos del pintor Diego Rivera en la década de los 50.
La discusión no es nueva, la dinastía Pinal ha sido objeto de controversia debido a las acusaciones de Emilio Morales, un conocido publirrelacionista. Y es que según Morales, Silvia Pasquel y Alejandra Guzmán han creado la Fundación Silvia Pinal con el objetivo de quedarse con los bienes de la icónica actriz del Cine de Oro Mexicano, incluyendo un valioso cuadro que Diego Rivera regaló a Pinal.
Morales indicó que "suena muy padre para doña Silvia, que tenga su propia fundación, sin embargo, ustedes recordarán que hace muchos años le preguntaron a doña Silvia qué iba a pasar con la pintura que le hizo Diego Rivera, la famosísima pintura valuada como en 3 millones de dólares."
Morales también mencionó que, en el pasado, Silvia Pinal había manifestado su intención de dejar la pintura a la Fundación de Lola Olmedo. Con la desaparición de dicha fundación, la pintura estaba destinada a ser parte del patrimonio cultural de México. Sin embargo, con la creación de la Fundación Silvia Pinal, Morales acusa a las hijas de la actriz de tratar de quedarse con la obra y otras propiedades.
La explicación de la familia Pinal
En respuesta a las acusaciones, Ernesto Buitrón, periodista de "Todo para la Mujer", explicó que el cuadro en cuestión está claramente estipulado en el testamento de Silvia Pinal. Según Buitrón, "la pintura ya forma parte del testamento de doña Silvia Pinal y los dueños serán sus tres hijos."
Buitrón detalló que la Fundación Silvia Pinal no es una fundación cultural, lo cual impide que la pintura pueda ser donada o transferida sin el consentimiento de todos los herederos. La pintura se encuentra en un fideicomiso administrado por los tres hijos de Pinal, quienes deben acordar cualquier cambio en su estado o destino.
Declaraciones de Silvia Pinal en 2017
En 2017, Silvia Pinal ya había expresado su intención de dejar el cuadro en manos de sus hijos. La actriz comentó: "Lo voy a dejar a mis hijos: Alejandra, Luis Enrique y Sylvia, cuando ya no esté. Lo voy a heredar al Museo de Diego Rivera con cierta propiedad para mis hijos; ellos lo dan a la Casa de Diego, pero es de mis hijos, tiene seguro."
A pesar de las valoraciones fluctuantes, se estima que la pintura de Diego Rivera está valorada en aproximadamente 3 millones de dólares, equivalentes a casi 60
millones de pesos mexicanos. Esta valoración y la existencia de un testamento claro son las razones por las que la pintura no puede ser ni vendida ni donada sin seguir los procedimientos legales establecidos.
El valor cultural y la asignación testamentaria del cuadro de Diego Rivera garantizan que su destino esté bajo el control de los herederos directos de Silvia Pinal. Las acusaciones de Emilio Morales sobre la Fundación Silvia Pinal y la posible intención de sus hijas de quedarse con la pintura y otras propiedades parecen estar en conflicto con los detalles legales y testamentarios establecidos.
Versión de Pepillo Origel
Otro de los personajes que también ha tomado protagonismo en esta discusión sobre el bien cultural es el conductor de espectáculos Pepillo Origel, quien en una ocasión, durante una entrevista debido a una crisis de salud de la actriz en 2022, aseguró que Pinal le dejaría el cuadro como herencia.
Origel también detalló en ese entonces que, aunque él heredará el cuadro, lo prestará a un museo para que sea expuesto ahí.
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Con información de Associated Press
