Ciudad Juárez.- Han pasado 5 años de aquel fatídico día en que un atacante armado entró a una tienda Walmart y marcó a la comunidad de El Paso, pero también de Ciudad Juárez. Un hecho sangriento que dejó 23 personas fallecidas y otras 23 heridas.
El pasado 3 de agosto de 2019, Patrick Crusius condujo por más de nueve horas desde su residencia en Allen, Texas, para llegar al estacionamiento de la tienda y disparar con un arma AK-47 y consumar su objetivo contra la comunidad hispana.
El tiroteo se informó a las 10:39 de la mañana, pero la policía llegó al lugar seis minutos después.
Fue hasta las 12:40 de la tarde que el tráfico del escáner de conversación policíaca indicó que los esfuerzos de seguridad habían recuperado el arma y el automóvil del sospechoso.
Tras el ataque, el sujeto fue detenido sin resistencia por elementos el Departamento de Policía de El Paso y acusado de asesinato capital.
A través de llamadas, en ambos lados de la frontera buscaban ubicar a familiares y amigos, lejos de la escena del crimen.
El recuento final establece que las víctimas, en su mayoría eran mexicanos o de ascendencia hispana, pues la tienda ha sido siempre una de las más accesibles y preferidas de los juarenses y visitantes del estado de Chihuahua en sus compras en El Paso.
Del total de las víctimas, seis eran residentes de Ciudad Juárez y dos más de Chihuahua capital.
Entre los fallecidos se encontraban 14 ciudadanos de EU: André Pablo A., de 24 años; Jordán A., de 24 años; Arturo B., de 60 años; Leonard C.C., de 41 años; María F., de 77 años; Raúl F., de 77 años; David J., de 63 años; Luis A. J., de 90 años; Elisa M., de 57 años; Maribel L., de 56 años; Margie R., de 63 años; Angelina S., de 86 años y Juan V., de 77 años, y el más joven, Javier R., de 15 años.
De los ocho mexicanos, se encontraban los juarenses Elsa M. M.; Jorge C. G., de 61 años; Adolfo C. H., de 68 años; María E. L. de 58 años, Iván F. M. de 46 años; Gloria I. M. de 61 años; Sarah E. R., de 66 años; y Teresa S., de 82 años.
Además, entre las víctimas se encontraba Alexander G. H., de 66 años, quien era de nacionalidad alemana.
Crusius, quien inicialmente le dijo a la policía que el objetivo del ataque eran los mexicanos, se declaró culpable en febrero de 2022 los 90 cargos, de los que por lo menos la mitad de ellos son considerados delitos federales de odio.
La acusación contra el joven tirador incluyó 23 cargos de delitos de odio con resultado de muerte, 23 por el uso de un arma de fuego para cometer asesinato, 22 cargos de delitos de odio que involucran el intento de matar y 22 cargos de uso de un arma de fuego durante y en relación con un delito de violencia.