El Paso.- La temporada de tazones trae consigo más que emoción deportiva a la región fronteriza. El esperado 91° Tony the Tiger Sun Bowl, que se llevará a cabo el martes 31 de diciembre al mediodía, es mucho más que un partido de futbol americano: es un motor económico y un catalizador de eventos turísticos en El Paso.
Este año, el enfrentamiento entre los Huskies de la Universidad de Washington y los Cardenales de Louisville promete atraer multitudes, no solo al estadio Sun Bowl, sino también a los hoteles, restaurantes y tiendas locales. Brooke Underwood, directora ejecutiva de Visit El Paso, destaca que el partido es clave para revitalizar la actividad económica en un período normalmente más tranquilo del año.
"El Sun Bowl no solo fortalece nuestra economía con la llegada de visitantes, sino que también refuerza el atractivo de nuestra región como un destino turístico competitivo", afirmó Underwood. Además, mencionó que los eventos complementarios, como el WinterFest y la nueva celebración de Nochevieja con la caída de la bola en el centro de la ciudad, buscan extender la estancia de los turistas, aumentando el impacto económico.
El Sun Bowl no solo celebra el deporte, sino que también simboliza el esfuerzo continuo por posicionar a El Paso como un destino vibrante y lleno de actividades para residentes y visitantes. Con una combinación de tradición deportiva y festividades invernales, la ciudad se prepara para cerrar el año con energía y optimismo.
