EN MEDIO del caos que dejaron las lluvias más intensas en lo que va del año en Ciudad Juárez, la respuesta ciudadana volvió a ser más fuerte que la tormenta. Vecinos, familias, jóvenes y comerciantes se han organizado espontáneamente a través de redes sociales para acopiar víveres, ropa, cobijas y artículos de limpieza para quienes lo perdieron casi todo.
En colonias como Lomas del Rey, Fronteriza o Mariano Escobedo, el agua entró con fuerza, subió por encima de los 50 centímetros y arrasó con pertenencias, estructuras y, en un caso, cobró la vida de un hombre de 65 años.
Mientras las cifras oficiales hablan de más de 150 viviendas afectadas, personas arrastradas por la corriente pero que afortunadamente fueron rescatadas y estructuras colapsadas, lo que no se puede contabilizar fácilmente es el esfuerzo colectivo de cientos de personas que decidieron no quedarse de brazos cruzados.
Desde ciudadanos comunes, hasta organismos empresariales y escuelas han puesto su granito de arena; Canaco, por ejemplo, lanzó su propia campaña de recolección, y universidades como la UTCJ enviaron brigadas de estudiantes para ayudar directamente en las zonas más afectadas.
Por su parte, las autoridades también han respondido. La Junta Municipal de Agua y Saneamiento (JMAS) desplegó maquinaria para las labores de limpieza, el municipio habilitó albergues y Protección Civil coordinó evacuaciones. El Ejército activó el Plan DN-III para sumarse a las tareas de rescate y apoyo a la población.
El presidente municipal Cruz Pérez Cuéllar informó que ya se lleva un avance importante en el censo de viviendas afectadas, e indicó que al menos 30 podrían requerir reubicación. Mientras que el sector Salud también ha hecho lo propio con brigadas de vacunación y atención a las personas que requieran atención médica en las zonas más afectadas.
Y si bien en Juárez la emergencia ha sido más visible, el resto del estado también ha recibido atención.
En regiones como Creel, Buenaventura, Guachochi y Namiquipa, cuadrillas del Gobierno del Estado entregaron despensas, material de construcción y kits de limpieza. Las maquinarias de la Secretaría de Comunicaciones y Obras Públicas trabajaron a marchas forzadas para despejar caminos, reforzar bordos y mantener abiertas las rutas necesarias para que la ayuda llegara. A pesar del tamaño de la emergencia, los tramos estatales permanecen transitables y la respuesta institucional no se ha detenido.
Mientras tanto, la lluvia sigue, y con ella, el riesgo de más afectaciones. Pero si algo han dejado claro los últimos días, es que en Chihuahua —y especialmente en Juárez— el verdadero sistema de contención es la gente.
LA VIDA de un partido político no termina cuando pierde su registro; sigue un proceso formal de liquidación que, aunque técnico, dice mucho sobre el estado de la democracia en nuestro país y en nuestro estado.
Esta semana, el Instituto Estatal Electoral de Chihuahua (IEE) celebró su tercera sesión ordinaria del año y abordó precisamente el cierre de capítulos de varios partidos que ya no tienen cabida en la política local.
En concreto, el Consejo Estatal del IEE dio seguimiento a los informes de los interventores encargados de liquidar a los partidos locales Pueblo, México Republicano Chihuahua y Nueva Alianza Chihuahua. Estos procesos incluyen revisar archivos, finanzas, bienes y toda la documentación que conformaba la estructura de cada organización.
Lo anterior es un trámite que puede parecer rutinario, pero que sirve para evitar que los partidos se disuelvan en la opacidad o dejen pendientes sin resolver.
El caso de Nueva Alianza Chihuahua es particularmente ilustrativo. Su registro se canceló en 2021, y apenas este año se concluyó formalmente el proceso de liquidación. Es decir, entre que un partido deja de existir políticamente y se le da cierre administrativo pueden pasar años. Esa lentitud muchas veces pasa desapercibida para el ciudadano común, pero no por ello deja de ser relevante.
Más allá de lo técnico, este tipo de sesiones del IEE también nos recuerdan que el sistema democrático funciona en varias capas, no sólo en las campañas y las urnas, sino también en los procedimientos de control, fiscalización y rendición de cuentas. Cuando un partido desaparece, es importante saber qué se hizo con los recursos públicos que recibió mientras existió.
ESTA SEMANA, el secretario de Hacienda del Estado, José de Jesús Granillo, sostuvo un encuentro con representantes de la CEPAL, el brazo económico de la ONU para América Latina y el Caribe. ¿El objetivo? Aportar insumos para que ese organismo internacional diseñe una estrategia de desarrollo productivo enfocada en el estado. En otras palabras, trazar una ruta que le permita a Chihuahua consolidarse como un jugador competitivo frente a los desafíos económicos globales.
Durante la reunión, el funcionario estatal presentó el estado de las finanzas públicas y las medidas que, asegura, han fortalecido la recaudación local y reducido la dependencia del presupuesto federal.
Pero el interés de la CEPAL no sólo radica en lo fiscal, pues en el encuentro hubo especialistas en desarrollo empresarial, ciencia, tecnología y planeación territorial que visitaron el estado para escuchar, diagnosticar y entender las capacidades de la entidad para luego construir una propuesta a medida. Una estrategia que no sólo piense en el presente, sino que permita a Chihuahua adaptarse al mundo que viene, uno más interconectado, más competitivo y más exigente en materia de innovación.
En la reunión estuvo presente la subsecretaria de Egresos, Verónica García; la coordinadora de Presupuesto Basado en Resultados y Sistema de Evaluación al Desempeño, Valeria Blanco, así como los funcionarios de la CEPAL que visitaron el estado de Chihuahua.
También estuvo Marco Dini, oficial de Asuntos Económicos, División de Desarrollo Productivo y Empresarial; Natalia Genta, oficial a cargo del Área de Planificación, Prospectiva y Desarrollo Territorial, Instituto Latinoamericano y del Caribe de Planificación Económica y Social (ILPES) y Nicolo Gligo, oficial de temas de ciencia, tecnología e innovación, extensionismo tecnológico y emprendimiento, División de Desarrollo Productivo y Empresarial.
Chihuahua ya tiene lo que muchos otros estados buscan, industria, ubicación estratégica, mano de obra calificada. Ahora, con una mirada de largo plazo y el acompañamiento de expertos internacionales, el reto es convertir ese potencial en una ventaja sostenida.
LA PROPUESTA para eliminar las listas plurinominales despertó reacciones a lo largo de los últimos días, y una de las más relevantes vino del sector empresarial. Jorge Treviño Portilla, presidente de Coparmex Chihuahua, se dijo listo para sentarse a dialogar con los diputados y construir, desde el debate, una reforma que no ignore los matices del sistema electoral.
La postura de Coparmex no es de rechazo automático, pero sí de advertencia; si se va a modificar la forma en que se elige a los representantes, debe hacerse con responsabilidad, técnica y sobre todo, de forma incluyente. Por eso la iniciativa de abrir foros con participación de cámaras empresariales, universidades, organizaciones civiles y ciudadanía va más allá de una formalidad; es una manera de insistir en que las reglas del juego democrático no deben definirse entre pocos.
Además del llamado al diálogo, el organismo patronal presentó ideas puntuales para mejorar la propuesta. Entre ellas, ampliar el rango de edad para los distritos juveniles, establecer mecanismos mixtos de asignación que combinen votos y porcentaje, y permitir que los regidores sean electos directamente y no a través de planillas cerradas. También proponen detallar técnicamente cómo funcionarían los distritos insaculados, para evitar que una buena intención se traduzca en un modelo sin sustento.
El fondo del debate es cómo lograr un Congreso representativo sin caer en la sobrerrepresentación, pero tampoco en la exclusión. La eliminación de las listas plurinominales toca fibras sensibles porque implica revisar el equilibrio entre mayoría y minorías, entre legitimidad de votos y diversidad política.
La agenda legislativa aún puede abrirse al diálogo. Lo que viene no debe tratarse solo de contar votos, sino de escuchar argumentos. Porque si se va a cambiar la forma en que votamos, primero hay que escuchar a quienes lo hacen.