Este domingo se llevará a cabo la tan mencionada y criticada consulta popular, en donde el presidente de la República Andrés Manuel López Obrador, pregunta a las y los mexicanos si se inician investigaciones en contra de los expresidentes anteriores, por actos de corrupción y malos manejos.
Para que esto surta efecto, es necesario que el 40 por ciento del padrón electoral de México vote, pero en las últimas elecciones solo se llega a un 30 por ciento, veremos el poder de convocatoria que tendrá en esta jornada.
Para una gran mayoría de la población está consulta no tiene fundamentos, pues bien, las autoridades de procuración de justicia, como es la Fiscalía General de la República, no necesitan "pedir permiso" a la población para hacer su trabajo, solo se hace.
Del lado de la bancada de Morena, partido del presidente y fieles seguidores a cada acción que se da desde Palacio Nacional, adelantan que si no se da el resultado favorable, será culpa del INE, organizador de dicha consulta, además de ser señalado como cómplice de las administraciones anteriores.
No hay que olvidar que López Obrador ya dijo que de participar en la consulta, pondrá que no, porque no es su "estilo" tomar venganza ni revanchismo.
El empresario parisiense Otto V. B, detenido por la operación Justicia para Chihuahua, por ser cómplice del ex gobernador César Duarte Jaques en desvío de recursos, alcanzó su libertad a través de un amparo.
Fue el pasado viernes que obtuvo su libertad, tras presentar un amparo que alegaba las malas condiciones en que lo trataban, incluyendo cuando estuvo en el Cereso de Parral, en donde se contagió de Covid-19.
Dicho amparo tenía meses en el tribunal y en los últimos se resolvió a su favor, recobrando su libertad de poder salir de su casa, porque estaba en arresto domiciliario en los últimos meses.
Otto es señalado de desviar 20 millones de pesos a través de una simulación de contrato de adquisición a través de la empresa Valles Baca Hermanos S.P.R de R.L de C.V.
