EL DELITO de secuestro ha reaparecido en Ciudad Juárez. En apenas cuatro meses, las autoridades estatales han detenido a 50 personas presuntamente involucradas en este crimen, lo que da cuenta de una ofensiva policial activa, pero también de un problema que se ha reconfigurado y adaptado.
El fiscal general César Jáuregui Moreno atribuye este repunte a una reorganización del crimen, con menos migrantes en tránsito por la región —blanco frecuente en otros momentos—, los secuestradores han enfocado sus esfuerzos hacia ciudadanos juarenses. Empresarios, profesionistas y personas comunes se han convertido en objetivos. Las autoridades han logrado rescatar a algunas víctimas, pero el patrón de violencia indica que se trata de algo más que simples casos aislados.
Desde la Mesa de Seguridad y Justicia, integrada por ciudadanos y organizaciones, se ha documentado que las víctimas recientes son residentes de Juárez, descartando que se trate de personas en contexto de movilidad. Esta precisión muestra que los secuestros no están ligados únicamente al paso migrante, sino que reflejan un riesgo real y presente para la población local.
Frente a esto, los tres niveles de gobierno han intentado reforzar la coordinación. El presidente municipal, Cruz Pérez Cuéllar, afirma que se están revisando los casos uno por uno y que parte de las víctimas podrían estar relacionadas con actividades ilegales. Por su parte, el secretario de Seguridad Pública Municipal, César Muñoz Morales, sostiene que no hay reportes de secuestros ligados a ventas por redes sociales —un modus operandi común en otras regiones—, y asegura que se trabaja en un proyecto tecnológico para prevenir estos crímenes.
Sin embargo, el fondo del problema exige más que vigilancia o herramientas digitales. Manuel Salas, fiscal de la Zona Norte, plantea la necesidad de analizar el contexto social detrás de cada caso, quiénes son las víctimas, qué motivaciones tienen los criminales, qué condiciones permiten que este delito reaparezca. Es decir, entender la estructura del fenómeno, no solo su manifestación violenta.
La memoria de Juárez está marcada por el secuestro. Durante años, fue sinónimo de miedo, desapariciones y extorsión. Su reaparición no puede tomarse a la ligera ni minimizarse bajo explicaciones circunstanciales. Este tipo de crimen transforma el tejido social, rompe la confianza en el entorno más cercano y, sobre todo, vulnera directamente a las familias.
Las autoridades deben asumir que no se trata solo de un repunte temporal, sino de un síntoma que exige respuestas en materia de prevención, investigación, justicia y, sobre todo, una estrategia que no dependa únicamente del número de detenciones.
COMENZARON a llegar al estado de Chihuahua esta semana, los paquetes con aproximadamente 18 millones de boletas que serán utilizadas en la elección extraordinaria del próximo 1 de junio, en la que por primera vez se votará para renovar cargos del Poder Judicial Federal.
El Instituto Nacional Electoral (INE) recibió el material en las nueve juntas distritales del estado. Ayer llegó el material a Chihuahua Capital y Delicias, además de que otro cargamento salió con rumbo a Cuauhtémoc y Juárez.
Rogelio Villalobos, vocal de organización electoral del INE, informó que los preparativos avanzan conforme al calendario previsto. Aunque se trata de una elección extraordinaria, la logística es similar a la de otros procesos federales, se movilizan millones de documentos, se habilitan casillas y se capacita a funcionarios para garantizar una jornada ordenada.
Durante la recepción del material electoral ayer en la Junta Distrital Federal 08, Villalobos señaló que en los próximos días se dedicarán al sellado de las boletas y, posteriormente, se realizará su distribución a los centros de votación.
Lo distinto es el objetivo. Esta vez, las urnas no definirán legisladores ni alcaldes, sino la composición del Poder Judicial. Es una votación sin precedentes en México, y aunque el aparato electoral ya está en marcha, persisten dudas entre amplios sectores de la población sobre qué cargos estarán en juego y cuál será su impacto en la vida pública.
El desafío ya no está en el despliegue técnico, sino en el nivel de información con el que llegará el electorado a las casillas. Las boletas ya están en el estado. Ahora falta que los votantes también estén listos.
EN JUAREZ, el Hospital General recibió esta semana la visita de autoridades estatales, con la intención de buscar mejorar la calidad de los servicios médicos.
El secretario de Salud, Gilberto Baeza Mendoza, y el secretario de Hacienda, José de Jesús Granillo Vázquez, recorrieron áreas como urgencias, cuidados intensivos, quirófanos y cancerología, esta última recientemente remodelada.
Además, escucharon al personal médico y de enfermería, quienes expusieron necesidades que van desde equipamiento hasta condiciones laborales.
Ciudad Juárez arrastra un rezago histórico en materia de salud pública. En el Hospital General, el sobrecupo, la falta de personal, los insumos limitados y el desgaste del equipo médico son problemas constantes. Las remodelaciones parciales, como en el área de cancerología, no resuelven las carencias estructurales que enfrentan otros servicios igual de urgentes, es por eso que este tipo de visitas ayudan a conocer no sólo qué le duele al nosocomio, sino también para definir acciones que permitan brindar a los pacientes y sus familias una mejor atención.
Las autoridades estatales aseguran que este acercamiento directo les permitirá tomar decisiones informadas sobre el uso de recursos públicos. La salud requiere también de inversión, mantenimiento, contratación y supervisión.
A la supervisión también asistieron Carlos Ortiz, representante del Gobierno del Estado en Juárez; la directora del Hospital General, Julia Ester Carranza Tapia, y el director médico de la Secretaría de Salud, César Aragón.
EL SENADOR Juan Carlos Loera de la Rosa hizo pública su intención de mantenerse vigente rumbo al proceso electoral de 2027, al declarar que “no lo descarten” para ninguna aspiración política.
Su pronunciamiento ocurre mientras Morena inicia la organización interna con miras a las elecciones en las que se renovará el Gobierno del Estado, el Congreso local, los 67 ayuntamientos y sus respectivas sindicaturas
Durante su participación en el Congreso Nacional del partido, Loera afirmó que su labor legislativa ha respondido a las necesidades de la población chihuahuense y que ha mantenido un canal constante de comunicación con la ciudadanía. También insistió en que su desempeño ha estado alineado con los principios fundacionales del movimiento.
El legislador busca mantener presencia pública dentro de un partido que ya anticipa una competencia interna por las candidaturas más relevantes en el estado. Loera no sólo se proyecta como posible contendiente, también aboga por una contienda interna abierta, en la que cualquier integrante de Morena pueda participar.
