LA FRONTERA entre México y Estados Unidos es un espacio cargado de tensiones y esperanzas, donde decisiones políticas a nivel internacional tienen repercusiones inmediatas en comunidades locales y en la vida de miles de migrantes.
Con la llegada de Donald Trump a la oficina oval, en Juárez se pudieron sentir las primeras repercusiones con la cancelación de las citas realizadas por la aplicación CBP One, una plataforma que había permitido a casi un millón de personas ingresar legalmente a Estados Unidos con derecho a trabajar.
Un aviso publicado el lunes en el sitio web de Aduanas y Protección Fronteriza, poco después de que Trump prestara juramento, informaba a los usuarios que la aplicación que se había utilizado para permitir a los migrantes programar citas en ocho puertos de entrada de la frontera suroeste ya no estaba disponible.
En Juárez, cerca de 30 migrantes se quedaron varados en el Puente Internacional Paso del Norte; todos tenían citas programadas con CBP, las cuales ya no fueron reprogramadas tras la cancelación del programa, reflejando así la complejidad de las políticas migratorias y sus impactos humanos.
La cancelación de estas citas, que coincide con el inicio del mandato del presidente Donald Trump y sus declaraciones sobre posibles deportaciones masivas, ha dejado a estos migrantes en un limbo. Con comprobantes en mano, los afectados, no solo enfrentan la frustración de una oportunidad perdida, sino también el temor a una prolongación de su sufrimiento.
"Le pedimos a Donald Trump que tenga un poquito de consideración con nosotros", expresó Johnny, quien ve en este proceso más que un trámite: una esperanza de reconstruir su vida.
Por otro lado, el alcalde de Juárez, Cruz Pérez Cuéllar, ha señalado que la ciudad está preparada para un posible aumento en el flujo de deportados, tanto mexicanos como extranjeros. Los albergues existentes, como Felipe Ángeles, Leona Vicario y aquellos operados por asociaciones civiles y religiosas, están habilitados para recibir a quienes necesiten refugio.
Pérez Cuéllar también destacó que, aunque se espera que la mayoría de los mexicanos repatriados retornen a sus estados de origen o se reúnan con familiares, se mantendrá la coordinación con los niveles superiores de gobierno para garantizar una respuesta adecuada ante cualquier eventualidad.
La posibilidad de deportaciones masivas, como lo ha insinuado Trump, genera incertidumbre y preocupación tanto en los migrantes como en las comunidades fronterizas. Aunque actualmente los albergues cuentan con capacidad, este escenario subraya la necesidad de mantener una infraestructura de apoyo robusta, así como políticas que prioricen la dignidad y los derechos humanos de las personas en movilidad.
LA GOBERNADORA Maru Campos Galván estuvo como invitada en la reunión del Comité Ejecutivo Nacional del PAN, en donde aprovechó para dejar un mensaje claro y contundente: el Gobierno del Estado está comprometido con la protección y el desarrollo de los juarenses, así como con el respeto a la dignidad humana en todas sus expresiones.
Lo anterior, precisamente ante los rumores de deportaciones masivas que generan temor e incertidumbre. La gobernadora hizo un llamado a la calma, asegurando que estos mensajes no debilitarán a una comunidad que se ha forjado a base de esfuerzo y resiliencia. En su discurso, reafirmó el compromiso de su gobierno para actuar con un enfoque humanista, brindando apoyo y respeto a todas las personas, sin importar su origen.
Este posicionamiento es clave para una ciudad como Juárez, cuya identidad está profundamente entrelazada con la migración. La frontera no solo es un punto de tránsito; también es un espacio de encuentro, donde historias y sueños de diferentes partes del mundo convergen. En este sentido, el compromiso de garantizar dignidad, atención básica y respeto para las personas migrantes se alinea con la esencia solidaria de la región.
En momentos de incertidumbre, mensajes como el de la gobernadora son fundamentales para generar confianza y unidad.
LA DESIGNACIÓN de Héctor Núñez Polanco como nuevo titular del Consejo Coordinador Empresarial (CCE) en Juárez llega en un momento de muchos retos para la ciudad y la región fronteriza.
Núñez, llega en relevo de Isela Molina, presidenta de Canacintra, y será el encargado de mantener una coordinación efectiva entre cámaras empresariales, asociaciones civiles y autoridades para aprovechar las oportunidades que surjan y mitigar los retos que se presenten en los próximos seis meses, tiempo que durará su gestión.
En su toma de posesión, Núñez Polanco reconoció la importancia de los desafíos que marcarán su gestión, desde la transición presidencial en Estados Unidos hasta los temas pendientes en la ciudad, como el posible cierre del Puente Córdova Américas al tráfico de mercancías y la creciente presión migratoria.
El también presidente de Desarrollo Económico del Norte A.C. (DENAC) destacó la necesidad de observar detenidamente las primeras acciones del nuevo presidente de Estados Unidos, especialmente en temas sensibles como los aranceles y las políticas migratorias.
La presidencia de Núñez Polanco en el CCE no solo debe enfocarse en resolver problemas inmediatos, sino también en diseñar estrategias que permitan a Ciudad Juárez fortalecer su papel como un motor económico de la frontera. La
LA REUNIÓN anual de la Asociación Ganadera Local de Juárez (AGLJ) puso de manifiesto la resiliencia y el compromiso de este sector, que, a pesar de enfrentar retos como la sequía y las restricciones sanitarias, ha demostrado ser un pilar importante para el desarrollo económico de Chihuahua.
En el evento que se realizó ayer en esta frontera se destacó el trabajo realizado en 2024 y los planes para seguir impulsando la actividad ganadera en la región.
Uno de los anuncios más relevantes fue la aprobación, por parte del Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA), de los cambios realizados a las instalaciones cuarentenarias ubicadas en la frontera de Juárez y El Paso; decisión que permitirá reanudar el comercio ganadero hacia Estados Unidos, tras meses de suspensión por la detección de un gusano barrenador en el ganado procedente de Chiapas.
Con un estimado de 250 mil cabezas de ganado listas para cruzar, esta reapertura representa un alivio económico significativo para los productores locales y regionales.
Álvaro Bustillos Fuentes, presidente de la Unión Ganadera Regional de Chihuahua, destacó que este logro es el resultado del esfuerzo coordinado entre productores de diversos estados, quienes trabajaron incansablemente para garantizar la sanidad del ganado y cumplir con los estrictos estándares de exportación.
Otro punto destacado en la reunión fue el informe del presidente de la AGLJ, Alfonso Deandar Duarte, quien señaló que, a pesar de los desafíos climáticos, el sector ha salido adelante gracias al apoyo gubernamental y a la colaboración entre los diferentes actores del gremio.
El reto hacia adelante será continuar fortaleciendo las cadenas de valor, promover la innovación tecnológica en el sector y garantizar la sanidad y calidad del ganado.