Chihuahua está a meses de vivir las elecciones más grandes de su historia. Las presidencias municipales, sindicaturas, diputaciones locales y federales, y la gubernatura se van a renovar. Ante tal magnitud, las instituciones tienen un reto mayor: garantizar la equidad en la contienda, y para eso acordaron blindar el proceso.

El Gobierno del Estado, el Instituto Estatal Electoral (IEE), y el Tribunal Estatal Electoral (TEE), firmaron un convenio para que las acciones de los aspirantes a los cargos de elección popular se manejen conforme a lo establecido, que no intenten sacar ventaja y que actúen con mesura antes y durante la jornada histórica.

Dentro del blindaje se considera la capacitación, tanto para los postulados como los ciudadanos en general. Buscan la imparcialidad y la legalidad en todo momento. Quieren demostrar su capacidad preventiva y comprobar la buena fe de los participantes; que no haya ningún indicio de delitos electorales.

El gobernador Javier Corral, la presidenta del IEE, Arlett Espino, y el presidente del TEE, Julio César Merino, tienen claro que no puede haber grandes fallas ni problemas que comprometan las elecciones en Chihuahua, por eso toman previsiones. Se espera que aspirantes, funcionarios y la gente de a pie, se comporte a la altura.


Y antes de que se pongan más estrictos, hay que aprovechar el momento. En Ciudad Juárez anduvo la candidata del Partido Acción Nacional (PAN) a la gubernatura, Maru Campos Galván, para reunirse con mujeres militantes del blanquiazul. Este diálogo forma parte de las acciones de agradecimiento de la aspirante.

Aprovechando el viaje, Campos Galván compartió ideas y experiencias con las mujeres panistas. Como parte de su discurso, incluso desde antes de mostrar sus intenciones por competir por la gubernatura, ha dicho que las mujeres tienen la capacidad y el conocimiento para cambiar el rumbo del país, aunque la renuencia de la sociedad lo impide.

La reunión también sirvió para comprometerse a trabajar en conjunto con las organizaciones civiles, el sector público y privado. De alguna forma Maru Campos quiere continuar con la estrategia que la caracterizó cuando estaba al frente de la Presidencia Municipal de Chihuahua. Si le funcionó, ¿por qué no repetir?


Quien tampoco pierde el tiempo es Alfredo “El Caballo” Lozoya. Hace se poco se dijo listo para defender Chihuahua, y para conseguirlo recorre los diferentes municipios del estado, aunque ciertamente pone más atención en los lugares más relevantes, Ciudad Juárez por ejemplo. La frontera se vuelve más común en su itinerario.

Esta vez se le pudo ver por la colonia Mariano Escobedo, donde además de reunirse con los vecinos, aprovechó el tiempo libre para degustar unos famosos tacos. En estos momentos cualquier experiencia es válida con tal de llegar ahí, a los ciudadanos. Quiere lograr la empatía a su máximo nivel.

El Caballo Lozoya también aprovechó para reconocer el trabajo de los juarenses: su rasgo característico es siempre ir adelante. Ahora el candidato a la gubernatura con Movimiento Ciudadano tendrá quien le ayude en la captación de apoyos: Juan Muñoz, el coordinador del Comité Municipal, será la pieza clave.


Sin descanso. Las acciones u omisiones del Gobierno de México son oportunidad para que la oposición se lance con todo en contra del líder de la Cuarta Transformación. Esta vez, el PAN de Chihuahua recordó que las decisiones tomadas desde la capital del país han sido negativas para los mexicanos.

Ante este escenario que califican como desastroso, el dirigente municipal en Chihuahua del blanquiazul, Paco Navarro, convocó a un evento donde aseguró que la 4T no es camino que le conviene al estado, por eso trabajaran más para frenar su avance vertiginoso. Quieren ganarles terreno.

Dicen que para conseguir su objetivo es necesario acercarse, cautivar e integrar a representantes de los distintos sectores, que coincidan con los planes del partido y que aporten ideas, más allá de la sola presencia. Ya veremos si esta estrategia les funciona, pues no es una empresa fácil.


La limpieza en las oficinas locales de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) no deja de causar reacciones encontradas. En el Congreso de Chihuahua, los diputados presentaron sus posturas sobre el tema, y como es habitual, no coincidieron. Las culpas por un lado y las excusas por otro, pero así es esto.

Miguel Ángel Colunga, de Morena, dijo que los despidos se deben al plan que tiene la administración para mejorar las condiciones del organismo. Además, aseguró que la atención estará garantizada para las personas que requieran algún trámite, excepto aquellos que sean extraordinarios.

En la otra esquina, Jesús Villarreal, del PAN, consideró que la decisión de la Conagua de despedir a los funcionarios se tomó solo con supuestos, sin que se determinara la responsabilidad en actos de corrupción, lo que deja un gran vacío de atención. De alguna forma lo tienen que resolver.

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