Gran revuelo ha causado esta semana la convocatoria para la realización de una manifestación femenina el próximo 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer y un Paro Nacional al día siguiente bajo la consigna de “El nueve ninguna se mueve”.
“Si paramos nosotras, para el mundo” dice la convocatoria y agrega: “Ni una mujer en las calles, ni una mujer en los trabajos, ni una niña en las escuelas, ni una joven en las universidades, ni una mujer comprando”
Hasta el momento no está muy claro el origen de esta iniciativa, pero un colectivo del estado de Veracruz, de nombre Brujas del Mar, se atribuye la idea que está causando controversia en el país.
La realidad es que México está en un momento delicado, pues los crímenes en contra de mujeres y niñas han sensibilizado a la población de tal manera que hace difícil discernir, entre lo que corresponde a una cultura de tradición antigua que le ha dado carta de naturalización al machismo de la sociedad y el momento político que se vive.
La inequidad de género es un problema ancestral, que se debe reconocer y encontrar soluciones educativas en medio de un sistema decadente que no forma para el cambio, sino que se mantiene en la reproducción de los mismos modelos.
Los sistemas de procuración e impartición de justicia tienen otra enorme deuda con la sociedad, arrojando cifras deficitarias de impunidad que se acercan al 100 por ciento en el esclarecimiento y sanción de los delitos, no solo contra mujeres, sino los que se cometen contra todos los demás.
Queda esperar los resultados de la convocatoria.
