EL FUTURO del Centro de Convenciones propuesto en el Parque Central podría quedar en manos de la ciudadanía. Así lo ha planteado el alcalde Cruz Pérez Cuéllar, quien anunció que, si la Secretaría de Bienestar autoriza la modificación del decreto que regula el uso de este espacio, someterá a votación popular la construcción del recinto.
La propuesta consiste en utilizar el 15% del Parque Central —unas 7.5 hectáreas de las 48 totales— para levantar el nuevo Centro de Convenciones. Ante la polémica que ha generado esta posibilidad, el alcalde aseguró que no se impondrá el proyecto sin antes consultar a los juarenses. De aprobarse el cambio en el decreto federal, llevará la propuesta al Cabildo para que se autorice un plebiscito organizado por el Instituto Estatal Electoral, donde cualquier ciudadano con credencial para votar pueda participar.
La intención de consultar a la población surge tras los acuerdos entre el gobierno estatal, municipal y empresarios locales, quienes han impulsado el proyecto como una herramienta para detonar el desarrollo económico de la ciudad. El sector privado ya comprometió 200 de los 600 millones de pesos necesarios para la obra, mientras que el resto sería aportado por instancias gubernamentales.
Colectivos ambientalistas, deportistas y ciudadanos han manifestado su rechazo a que el proyecto se realice dentro del Parque Central, lo que ha llevado a las autoridades a insistir en que la decisión debe abrirse a una participación más amplia. El alcalde ha dicho que reconoce a quienes se oponen de forma genuina, pero advierte que también hay grupos que buscan usar el tema con fines políticos. Por eso insiste en que, si se cumple el primer paso legal, será mejor que la mayoría decida.
Desde el Gobierno del Estado, el representante en Juárez, Carlos Ortiz Villegas, llamó a no adelantar conclusiones. Aseguró que aún se analizan otras opciones para la sede del Centro de Convenciones, incluida la compra de un predio privado, y que solo cuando se tenga una propuesta definitiva se convocará a un diálogo abierto.
Que la ciudadanía tenga la decisión en sus manos, con información completa y sin presiones, es lo que puede dar legitimidad a un proyecto que, por su dimensión e impacto, necesita consenso.
ESTE LUNES se firmará un convenio entre el Municipio de Juárez y el Infonavit para donar terrenos destinados a la construcción de viviendas. La idea es facilitar que el instituto federal construya parte del millón de casas proyectadas a nivel nacional, por lo que el alcalde Cruz estará visitando la ciudad de Chihuahua para concretar el trámite.
El Plan Nacional de Vivienda pensado para esta frontera y para el cual el Gobierno Municipal adquirió alrededor de 10 hectáreas de reserva territorial, tiene proyectado realizarse como vivienda vertical, una opción que permitiría a los juarenses adquirir departamentos mediante convenios con el Infonavit.
Roberto Mora, director del Instituto Municipal de Investigación y Planeación (IMIP), ya había adelantado que el proyecto planteaba construir alrededor de 7 mil viviendas en los próximos seis años, y una de las particularidades era que se trataba de viviendas verticales, de edificios de por lo menos cuatro pisos.
En la firma de este lunes se contempla la presencia de Octavio Romero Oropeza, director general del Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda de los Trabajadores (Infonavit). Es importante mencionar que el Infonavit se encargará de toda la operación una vez que se formalice la entrega del suelo.
LAS PERSONAS con discapacidad visual no contarán con boletas en braille en las elecciones del 1 de junio. El Instituto Nacional Electoral (INE) declaró inviable su implementación por razones presupuestales y técnicas, pese a tratarse de un derecho ya reconocido en procesos anteriores.
La decisión, además de limitar el ejercicio del voto libre y secreto, rompe con el principio de progresividad que debe regir en materia de derechos humanos.
El Consejo General del INE argumentó que el diseño de esta jornada electoral y los plazos legales impiden ofrecer este formato accesible. Aunque se permitirá que las personas con discapacidad visual voten con acompañamiento, medida que no representa una solución plena, pues votar con ayuda no equivale a hacerlo de manera autónoma.
Las consejeras Claudia Zavala y Carla Humphrey señalaron los efectos negativos que han tenido los recortes presupuestales en el ejercicio de los derechos ciudadanos. Humphrey propuso explorar alternativas tecnológicas, como boletas digitales con audio, para evitar que situaciones como esta se repitan.
La exclusión de las boletas en braille no es un detalle menor. Aunque el INE se comprometió a estudiar opciones de accesibilidad con miras a 2026, lo urgente era garantizar el acceso ya ganado.