MORENA aprobó este fin de semana un nuevo código ético que busca imponer límites claros a la ostentación, el nepotismo y las prácticas clientelares en sus campañas y candidaturas. La decisión se tomó por unanimidad durante la sexta Sesión Ordinaria de su Consejo Nacional, con la presencia de líderes estatales y municipales, entre ellos el alcalde de Ciudad Juárez, Cruz Pérez Cuéllar.
El acuerdo prohíbe el uso de vehículos blindados, aviones privados, espectaculares costosos y otros símbolos de poder que contradicen el discurso de austeridad con el que el partido se fundó en 2011. También impone restricciones al influyentismo y el favoritismo en los procesos internos, en un intento por cerrar el paso a prácticas que han generado tensiones dentro del movimiento y desgaste frente a la opinión pública.
La medida llega en un momento en donde Morena debe definir candidaturas en medio de disputas internas y el escrutinio sobre la forma en que ha ejercido el poder desde la presidencia de López Obrador. La carta enviada por la presidenta Claudia Sheinbaum sirvió como línea política para este ajuste. En ella pidió regresar a campañas “a ras de tierra”, casa por casa, sin lujos ni derroches.
Más que un simple gesto ético, el documento aprobado puede leerse como un intento por contener tensiones internas y frenar la cooptación de candidaturas por parte de grupos con poder económico o político.
Luisa María Alcalde, presidenta nacional del partido, y Alfonso Durazo, presidente del Consejo, coincidieron en que este viraje responde a una necesidad de revisar el rumbo. No obstante, el verdadero reto está en la aplicación de estas reglas.
Cruz no sólo asistió a la Sesión Ordinaria, sino que también aprovechó para reencontrarse y dialogar con figuras como Citlali Hernández, secretaria de las Mujeres y Mario Delgado, secretario de Educación Pública, con quien se tienen proyectos pendientes para Juárez.
El alcalde indicó que se acatarán las disposiciones para fortalecer el movimiento. Hay que recordar que apenas hace unos días, Cruz había comentado que se encontraba listo para lo que pudiera enfrentar en 2027, se dijo listo para competir pero esperando las reglas que emitiera el partido para formalizar su aspiración.
EN EL MARCO de la construcción de los Centros de Educación y Cuidado Infantil (CECI), el municipio de Juárez ha propuesto una iniciativa para mejorar el acceso a servicios de cuidado infantil para las familias de la frontera, especialmente aquellas que no están afiliadas al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).
En la propuesta, se sugirió al director del IMSS, Zoé Robledo, que el Gobierno Municipal, a través del DIF, administre uno o dos de estos centros, con el objetivo de ofrecer atención a hijos de padres no derechohabientes del Seguro Social.
La propuesta implica que el municipio aporte recursos para cubrir el costo de atención a los niños de padres no afiliados al IMSS, mientras que el IMSS se encargaría de los hijos de derechohabientes. Esta idea permitiría poner en marcha un proyecto piloto que, de ser exitoso, podría extenderse a otros centros en la región. Desde el ámbito local se ha señalado que el DIF municipal cuenta con los recursos y el personal necesario para llevar a cabo esta operación.
Además, se informó que el gobierno federal, a través del programa anunciado por la presidenta Claudia Sheinbaum, está construyendo las nuevas estancias infantiles con un enfoque de apoyar a las madres trabajadoras.
LA AUDITORÍA Superior del Estado (ASE) obtuvo una calificación de 99.33 sobre 100 en el Informe de Evaluación del Desempeño emitido por la Comisión de Fiscalización del Congreso local.
La evaluación destaca avances técnicos y administrativos en la gestión de la ASE, un órgano encargado precisamente de revisar cómo se ejercen los recursos públicos en Chihuahua. No es un logro menor que la auditoría estatal —durante años objeto de críticas por su vinculación con intereses políticos— haya consolidado procesos internos que hoy se reflejan en evaluaciones más rigurosas.
Aunque los resultados son mayoritariamente positivos, la evaluación reveló el incumplimiento de cuatro indicadores en el capítulo de informes específicos, debido a la falta de ejercicio de recursos en esa área, lo que impidió la inclusión de información relevante en un apéndice separado. A pesar de esta observación puntual, el resto de los capítulos fueron evaluados sin ninguna falla, obteniendo calificaciones perfectas.
El auditor superior, Héctor Acosta Félix, subrayó que hoy se privilegia la “fiscalización técnica” sobre la “fiscalización política”, con lo que intentó marcar una distancia con prácticas del pasado.
La evaluación incluyó también al Congreso del Estado, el Poder Judicial y otros organismos autónomos. En todos los casos, se trató de un ejercicio necesario para revisar cómo se ejerce el presupuesto público.
Una buena calificación no puede ser el punto final, sino apenas una referencia para seguir exigiendo más transparencia.
LA RICKETTSIOSIS ha dejado una marca alarmante en el estado de Chihuahua, con 17 casos confirmados y siete defunciones hasta el último reporte emitido el pasado 28 de abril. De acuerdo con las estadísticas, los municipios más afectados son Chihuahua, Juárez y Meoqui, donde los números reflejan la expansión de la enfermedad.
Chihuahua capital lidera la lista con nueve casos, seguida por Juárez con cinco y Meoqui con tres. El grupo más vulnerable es el de los niños entre cuatro y cinco años. Sin embargo, también se observa una afectación en adultos.
Lo más preocupante no son solo los números de casos, sino las vidas perdidas. De las siete defunciones registradas, cinco ocurrieron en Chihuahua y dos en Juárez. Los fallecimientos se distribuyeron principalmente en los grupos de 5 a 14 años y de 25 a 44 años, lo que resalta la gravedad del problema.
Aunque la cifra de casos este año muestra una ligera disminución en comparación con el mismo periodo del 2024 —con 25 casos y 11 defunciones en ese entonces—, la diferencia porcentual del 32 por ciento no debería ser motivo de complacencia. Los esfuerzos para frenar la propagación de la enfermedad deben intensificarse, y el sistema de salud debe seguir reforzando las estrategias para evitar que más vidas se sigan perdiendo.
